lunes, 4 de mayo de 2009

Frostbite completo // Vampire Academy 2 Descargar


Aquí les dejo los blogs de cada una de las chicas que hemos ayudado a traducidir el libro:


Geaf: Capítulo 14.

http://www.jennotas.blogspot.com/(Jen): Prólogo y capítulos 2, 4, 7, 10, 12, 13, 15, 16 (con Luu), 18, 19, 21 y 23.

http://besosdmariposa.blogspot.com/(Lala): Capítulo 6 y 22.

http://luxdilune.blogspot.com/(Luu): Capítulos 9, 16 (con Jen), 17 y 20.

Alba (yo misma): Capítulos 1, 3, 8 y 11


Espero que lo disfruten

Capítulo 6 // Shadow Kiss // Vampire Academy 3


Solo habian otros tres testigos de lo que paso en el patio. Aún asi, todos en la escuela parecían saberlo cuando regrese a las areas comunes más tarde. Las clases habian acabado, pero muchos estudiantes estaban en los corredores, estudiando o repasando para sus examenes o lo que furea. Ellos trataban de esconder sus miradas y murmuraciones, pero no lo hacian bien. Los que se atrevian a hacer contacto visual conmigo o me daban una sonrisa con los labios apretados o inmediatamente miraban a otro lado.
Fantástico.
Sin ningún lazo psiquico con Christian, no tenía ni idea de donde encontrarlo. Podía sentir que Lissa estaba en la biblioteca, y me imagine que ese sería un buen lugar para empezar a buscar.
Mientras caminaba hacia allá escuche la voz de un chico detrás de mi.
“Llevaste las cosas un poco lejos, no crees?”
Me voltee y vi a Ryan y a Camille caminando varios pasos atrás. Si yo hubiera sido un chico, la respuesta apropiada hubiera sido, “Te refieres a lo que hice con tu mamá?” Pero como soy mujer, y porque después de todo tengo modales, sólo dije, “No se de que estás hablando”.
Ryan se apuro a alcanzarme. “Tu sabes exactamente de que estoy hablando. De Christian. Yo escuche que cuando Stan te atacó, tu simplemente te portaste como ”si, matalo” y te fuiste de ahi”
“Oh mi dios” gruñí. Ya era lo suficientemente malo que la gente hablara de mi, pero porque las historias siempre terminan cambiando?
“Eso no es lo que paso”.
“Oh, si?” Preguntó. “Entonces por qué te llevaron a la oficina de Alberta?”
“Mira”, dije, de repente olvidando lo de los modales “Yo solo, hice todo mal durante el ataque... tu sabes, igual que tu esta mañana cuando no estabas poniendo atención en el pasillo”
“Hey” dijo el, sonrojandose un poco. “Al final ayudé un poco - yo hie lo que tenía que hacer”
“Es asi como le dicen ahora a que te asesinen?”
“Por lo menos no soy la perra llorona que se negó a pelear”. Apenas estaba comenzando a calmarme después de hablar con Dimitri, pero mi mal humor ya estaba empeorando de nuevo. Era como un termometro listo para estallar.
“Sabes, tal vez en lugar de estar criticando a los demás, deberias prestarle más atención a tus propios deberes de guardian” Mire hacia donde estaba Camille. Ella había estado callada todo el tiempo, pero su cara me mostraba que estaba asustada.
Ryan se encogió de hombros. “Puedo hacer las dos cosas. Shane esta detrás de nosotros y el área de adelante está limpia. No hay puertas. Fácil.” El acarició el hombro de Camille. “Ella esta segura”.
“Es un lugar fácil de asegurar. No estarías tan bien en el mundo real con Strigoi reales”.
Su sonrisa se desvaneció. La ira brilló en sus ojos. “Claro. Por lo que yo he escuchado, tampoco hiciste un gran trabajo alli, por lo menos no en lo relacionado a Mason”.
Tratar de hacerme daño con lo que paso con Stan y Christian era una cosa. Pero implicar que yo era la culpable de la muerte de Mason? Inaceptable. Yo fui la que mantuvo a Lissa a salvo en el mundo humano. Yo fui la que mató a dos Strigoi en Spokane. Yo era la única novata de la escuela con marcas molinja, pequeños tatuajes que les daban a los guardianes para representar los asesinatos de Strigoi. Yo sabía que habian algunos chismes sobre lo que le paso a Mason, pero nadie me habia dicho nada directamente a mi. El hecho de que Ryan o alguien más pensara que yo tenia la culpa de la muerte de Mason era demasiado.
Yo me culpaba a mi misma lo suficiente sin necesidad de más ayuda.
El termometro explotó.
En un sólo movimiento, lo sobrepasé a el, tomando a Camille y empujandola hacia la pared. No la empuje lo suficientemente fuerte para lastimarla, pero ella estaba visiblemente asustada. Sus ojos se abrieron en shock, y use mi codo para inmovilizarla, presionandolo contra su garganta.
“Que estás haciendo” exclamo Ryan, mirando una y otra vez su cara y la mia. Cambie cuidadosamente mi postura, manteniendo la presión en Camille.
“Adelantando tu educación” Le dije complacida. “Algunas veces los lugares no son tan fáciles de asegurar como tu crees”
“Estás loca! Tu no puedes herir a un Moroi. Si los guardianes se dan cuenta-”
No estoy loca” interrumpí. La mire a ella. “Te estoy lastimando? Sientes algún dolor extremo?”
Ella dudo, entonces sacudio su cabeza tanto como pudo.
“Estás incomoda?”
Un pequeño si.
“Ves?” Le dije a Ryan. “Incomodidad no es lo mismo que dolor”.
“Estas loca. déjala ir”
“No he terminado Ry. Pon atención porque aqui esta el punto: EL peligro puede venir de cualquier parte. No solo Strigoi o guardias vestidos como Strigoi. Sigue actuando como un imbecil arrogante que cree que lo sabe todo”- Presione mi brazo un poco más fuerte, aún sin ejercer tanta fuerza para que se le partiera un hueso o hacerla sentir dolor real- “y tu aún no sabes muchas cosas. Y esas cosas pueden matar tu Moroi”.
“Esta bien, esta bien. Como sea. Por favor detente” dijo el.
Su voz temblaba. No le quedaba más actitud. “La estás asustando”.
“Yo también estaría asustada si mi vida estuviera en tus manos”
El olor a clavos me avisó la presencia de Adrian. También sabia que Shane y algunos otros se habían acercado a observar. Los otros novatos se veian confundidos, como si quisieran entrometerse pero asustados de que hiriera de verdad a Camille. Sabía que la tenía que soltar, pero Ryan me habia hecho enojar demasiado. Necesitaba probarle algo. Necesitaba vengarme. Y realmente ni si quiera me sentía mal por Camille. Estaba segura de que ella tambien tenía su parte en todos los chismes que habian sobre mi.
“Esto es facinante” dijo Adria, su voz calmada, como siempre. “Pero creo que has dejado claro tu punto”.
“No lo se” dije. El tono de mi voz de alguna forma se oyó dulce y amenazador al mismo tiempo. “Todavia no creo que Ryan lo haya comprendido”
“Por el amor de dios, Rose! Lo entiendo” grito Ryan. “Sólo déjala en paz”.
Adrian se movio al rededor mio, quedando al lado de Camille. Ella y yo estabamos una sobre la otra, pero el se las arreglo para meterse en medio, logrando que su cara estuviera a la altura de mis ojos, casi al lado de la de ella. El tenia esa tonta sonrisa que normalmente me daba, peor habia algo serio en sus oscuros ojos verdes.
“Si, pequeña dhampir. Déjala ir. Ya terminaste aqui”.
Queria decirle a Adrian que se quitara de mi camino, que yo era la única que podría decidir cuando se habia terminado esto. Pero de alguna manera, no pude decir las palabras. Una parte de mi estaba iracunda por su intervención. La otra parte pensaba que el sonaba... razonable.
“Déjala ir” repitió. Mis ojos estaban sobre Adrian ahora, no con Camille. De repente decidí que de verdad sonaba razonable. Completamente razonable. Necesitaba soltarla. Quité mi brazo y me quite del medio. Con un salto, Camille se puso detrás de Ryan, usandolo como un escido.
Entonces me di cuenta que ella estaba al borde de las lágrimas. Ryan simplemente se veia sorprendido.
Adrian se incorporó y le dió a Ryan una mirada enojada. “Es mejor que te vayas -antes de que de verdad enojes a Rose”
Ryan, Camille y los otros se alejaron lentamente de nosotros. Adrian me rodeo con sus brazos y me guió rapidamente hacia la biblioteca. Me sentia extraña, como cuando me despiero, pero entonces, con cada paso, las cosas se ponian más y más claras. Empuje su brazo y lo aleje.
“Acabas de usar la compulsión conmigo!” grite. “Tu me hiciste soltarla”
“Alguen tenia que hacerlo. Se notaba que estabas a pocos segundos de estrangularla.”
“No estaba a punto de hacerlo. Y tampoco lo hubiera hecho” Abri la puerta de la biblioteca. “No tenias derecho a hacerme eso. Ningún derecho”
La compulsión -obligar a la gente a hacer lo que quieres- es una habilidad que todos los vampiros tienen en un pequeño nivel. Usarla es considerado inmoral, y la mayoria no lo controlan lo suficiente para hacer ningún daño real.Sin embargo, el espiritu refuerza esta habilidad, haciendo tanto a Adrian como a Lissa muy peligrosos.
“Y tu no tenias derecho a atacar a una pobre niña en el pasillo solo para aliviar tu ego herido”
“Ryan no tenia derecho a decir esas cosas”
“Ni siquiera se cuales son esas cosas, pero a menos de que haya calculado mal tu edad, estás muy grande para hacer un berrinche por un chisme”
“hacer un-”Deje de hablar cuando alcanzamos a Lissa trabajando en una de las mesas. Su cara y sus sentimientos me advirtieron que estaba en problemas. Eddie estaba a unos pocos metros de ella, apoyandose en una pared y observando el salón.
Sus ojos se abrieron cuando me vio, pero no dijo nada cuando me acerque.
Me deslice a la silla al frente de Lissa.
“Hey”Ella miro hacia arriba y suspiró, entonces le devolvio su atención al libro que tenía entre sus manos.
“Me preguntaba cuando ibas a aparecer” dijo ella. “Te suspendieron?”
Sus palabras sonaron calmadas y educadas, pero yo podía leer sus verdaderos sentimientos. Molesta. incluso un poco enojada.
“No esta vez” dije. “Sólo tengo que hacer servicio comunitario”
Ella no dijo nada, pero el humor irritado que sentia por el vinculo seguia incambiable. Ahora yo suspire.
“Está bien, hablame Liss. Se que estás enojada”Adruan me miro, entonces la miro a ella y de nuevo a mi.
“Siento que me estoy perdiendo de algo aqui”
“Oh ,fantástico” dije. “Fuiste y detuviste mi pelea y nisiquiera sabias de que se trataba todo”.
“Pelea?” preguntó Lissa, ahora confundida y enojada.
“Que pasó” repitió Adrian.
Mire a Lissa. “Vamos, cuentale”.
“Rose fue evaluada más temprano y se negó a proteger a Christian”Ella sacudio su cabeza, exasperada y me dió una mirada acusatoria. “No puedo creer que de verdad sigas tan enojada para hacerle eso a el. Es infantil”
Lissa habia sacado las mismas conclusiones que los guardianes. Yo suspiré. “No lo hice a propósito! Acabo de llegar de una audiencia por esta mierda y les dije a ellos lo mismo”.
“Entonces que paso?” demandó ella. “Por qué lo hiciste?
Yo dudé, insegura de lo que iba a decir. Mi renuencia a hablarno tenia nada que ver con Adrian y Eddie escuchando- aunque de verdad no queria que lo hicieran. El problema era más complejo. Dimitri tenia razón cuando hablo de las personas en las que podía confiar, y han dos personas en las que confio incondicionalmente: el y Lissa. Ya habia decidido no decirle la verdad a él. Como podía hacer lo mismo con ella? Aunque estaba enojada, yo sabia que sin lugar a dudas Lissa siempre me iba a apoyar y a estar ahi cuando la necesitara. Pero igual que con Dimitri, no quería contarle mi historia de vampiros. Como con Dimitri, la idea me dejo con las mismas opciones: loca o incompetente?A travez de nuestro vínculo, sentía su mente, pura y clara. No habia preocupaciones, ni oscuridad, ni señal de locura - y aun asi, algo se movia en el trasfondo. Una pequeña agitación. Los antidepresivos tardan un tiempo en entrar y salir de tu sistema, pero su magia ya se estaba despertando después de un sólo día.
Yo recordé mis encuentros fantasmales, cayendo en el recuerdo de ese triste, translúcido Mason. Como podría empezar a explicarle eso a ella?Como podia contarle algo tan raro y fantastico cuando ella estaba tratando tanto de lograr un poco de normalidad en su vida y se enfrentaba al reto de mantener su magia bajo control?No, me di cuenta. No podia contarle. No aún.
Espercialmente cuando se me ocurrio que había algo más importante sobre lo que teniamos que hablar.
”Me congelé” dije finalmente. “Es estúpido. He estado tan convencida de que puedo vencer a cualquiera, y entonces Stan... ” Suspire. “No lo se. No pude reaccionar. Es... es muy vergonzoso. Y con el, de todas las personas”
Lissa me estudio detenidamente, buscando alguna señal de deshonestidad. Me dolia que ella no confiara en mi, excepto que... bueno, le estaba mintiendo. Como le dije a Dimitri, yo podía ser una buena mentirosa cuando me lo proponia. Lissa no se dio cuenta.
“Ojala yo pudiera leer tu mente” dijo ella.
“Vamos” dije. “Tu me conoces. Realmente piensas que yo haría eso? Abandonar a Christian y quedar como una estúpida a proposito sólo para vengarme de mis profesores?”
“No” dijo ella finalmente. “Probablemente lo harias de una forma en la que no te atrapen”.
“Dimitri dijo lo mismo” gruñí. “Me alegra que todos tengan tanta fe en mi”.
“La tenemos” dijo ella. “Es por eso que todo esto es tan extraño”-
“Hasta yo cometo errores” Puse mi cara temeraria. “Se que es dificil de creer -hasta me sorprendio a mi misma- pero creo que tiene que pasar. Probablemente es algun balance karmico del universo. De otra forma no sería justo que existiera una persona tan grandiosa como yo”.
Adrian, convenientemente callado por una vez en la vida, nos estaba mirando hablar, como si se tratara de un partido de tennis. Sus ojos medio cerrados, y sospechaba que estaba estudiando nuestras auras.

Lissa rodo sus ojos, pero afortunadamente, la rabia que senti antes habia disminuido. Ella me creia. Su mirada se alejo de mi cara a alguien detras de mi.
Senti las felices, doradas emociones que indicaban la presencia de Christian.
“Mi leal guardaespaldas regresa” declaro, acercando una silla.
Miro a Lissa. “Ya terminaste?”
“Termine con que?” preguntó ella.
El inclino su cabeza hacia mi. “De regañarla a ella por la forma en que me entrego a las garras mortales de Alto”.
Lissa se sonrojó. Ya se sentía un poco mal por hacerlo, ahora que me habia defendido. Christian estaba divertido, sabiendo que su observación la habia hecho sentir un poco tonta.
“Estabamos hablando sobre eso. Es todo”Adrian bostezó y se acomodó de nuevo en su silla. “De hecho, creo que lo he resuelto todo. Esto fue una estafa, verdad? Un engaño para asustarme porque siempre estoy hablando de que tu serás mi guarfiana. Tu pensaste que al pretender ser una mala guardiana, yo dejaría de quererte. Bueno, eso no va a funcionar, asi que no vale la pena que arriesgues la vida de nadie por mi”.
Estaba agradecida con el por no mencionar el incidente del pasillo. Ryan se habia pasado de la raya, pero mientras más tiempo pasaba,más me costaba creer que hubiera explotado de esa forma. Se sentía como algo que le habia pasado a alguien más, algo que yo simplemente habia estado observando. Por supuesto, yo parecia estar explotando por todo ultimamente. He estado furiosa por ser asignada a Christian, furiosa por las acisaciones de los guardianes, furiosa por -
Oh, bien. Probablemente era hora de soltar la bomba.
“Asi que, um... hay algoo que ustedes deberían saber” .
Cuatro pares de ojos- Eddie incluido, se enfocaron en mi.“Que pasa?” pregutó Lissa. No habia una forma fácil de decirlo, asi que sólo lo hice.
“Bueno, resulta que Victor Dashkov nunca fue declarado culpable por lo que nos hizo. El tan sólo ha estado encerrado. Pero finalmente van a hacerle un juicio oficial la otra semana, o algo asi”.
La reacción de Lissa al oir ese nombre, fue similar a la mia. Senti su shock a traveés de nuestro vínculo, seguido inmediatamente por miedo. Una serie de imagenes recorrio su mente. La forma en que el juego enfermizo de Victor lo habían hecho dudar su salud mental. LA tortura a la que sus secuaces la habian sometido. El estado sangriento en que encontro a Christian después de ser atacado por los perros de Victor.
Ella apreto sus puños sobre la mesa, sus nudillos poniendose blancos. Christian no podia ver su reaccion de la misma forma que yo, pero el no lo necesitaba.
El puso su mano sobre la de ella. Ella apenas lo noto.
“Pero... pero... ” ella tomo un profundo y reconfortante suspiro, luchando por mantenerse calmada. “Como puede ser que no lo hayan declarado culpable todavia? Todos saben... Todos lo vieron...”.
“Es la ley. Se supone que ellos le deben dar la oportunidad de defenderse”. La confusión la estaba consumiendo y lentamente ella llego a la misma conclusión a la que llegue anoche con Dimitri.
“Asi que... espera... quieres decir que hay una posibilidad de que no lo declaren culpable?”
La mire, vi sus ojos asustados y no fui capaz de decirle nada. Aparente mi cara lo dijo todo. Christian le dio un puño a la mesa.
“Esto es una mierda!” Las personas alrededor de nuestra mesa miraron su ataque de ira.
“Asi es la política” dijo Adrian. “La gente con poder nunca juega bajo las mismas reglas”.
“Pero el casi mata a Rose y a Christian” lloro Lissa. “Y el me secuestro! como pueden haber dudas?”
Las emociones de Lissa estaban fuera de control. Miedo, tristeza. Indignación. Confusión. Desamparo. Yo no la queria ver soportando esos oscuros sentimientos y desee desesperadamente que se calmara de nuevo. Lentamente, firmemente, ella lo hizo-pero entonces comence a sentir la ira de nuevo. Me senti como con Ryan de nuevo.
“Es sólo una formalidad, estoy seguro”. Dijo Adrian. “Cuando tengan toda la evidencia, dificilmente va a haber algun debate”.
“Ese es el problema”. dije amargamente. “Ellos no van a tener toda la evidencia. No estamos autorizados a ir”.
“Que?” exlamo Christian. “Entonces quienes serán los testigos?”
“Los otros guardianes que estuvieron ahi. Aparentemente nosotros no permitiriamos que el juicio pasara desapercibido. La reina no quiere que el mundo se entere de que uno de sus preciosos miembros de la realeza pudo haber hecho algo malo”.
Lissa no parecia estar ofendida conmigo por hablar mal de la realeza.
“Pero nosotros somos la razón por la que el va a ser juzgado”.
Christian se paro, mirando alrededor como si Victor pudiera estar en la biblioteca. “Voy a encargarme de esto ahora mismo”.
“Seguro” dijo Adrian. “Apuesto a que ir por ahi derribando puertas va a hacerlos cambiar de opinión. Llevate a Rose contigo, estoy seguro de que los dos harían un trabajo maravilloso”.
“Si?” pregunto Christian, agarrando el espaldar de su silla y dándole a Adrian una mirada furiosa. “Tienes una mejor idea?”
La calma de Lissa comenzo a agitarse de nuevo.
“Si Victor estuviera libre vendría tras nosotros de nuevo?”
“Si queda libre de nuevo, no permanecerá asi por mucho tiempo” dije yo. “Me asuguraré de eso”.
“cuidado con eso” dijo Adrian. EL parecia encontrar algo gracioso en todo esto. “Ni siquiera tu podrias salirte con la tuya con un asesinato real”.
Comence a decirle que podría empezar a practicar con el, pero entonces la voz aguda de Eddie interrumpio mis pensamientos.
“Rose”El instinto nacido de años de entrenamiento inmediatamente tomo su lugar. Mire hacia arriba e inmediatamente vi lo que el habia notado. Emil habia acabado de entrar a la biblioteca y estaba supervisando a los novatos, tomando notas. Me pare de mi silla, tomando mi posición no muy lejos de Eddie, lo que me daba una buena visión de Christian y de toda la biblioteca. Maldición. Tenia que dominar mis impulsos o iba a terminar probando lo que Ryan dijo.
Entre mi pelea en el pasillo, y lo de Victor estaba descuidando totalmente mis deberes de guardiana. Ni siquiera iba a necesitar a Mason para fallar en esto.Emil no me vio sentada y socializando.
El paso cerca, nos observó y tomo notas antes de irse a explorar el resto de la biblioteca. Aliviada por evitarme otro problema, trate de clamarme de nuevo. Era dificil. Ese estado de animo oscuro me habia envuelto de nuevo, y escuchar la ira de Lisa y Christian por el juicio de Victor no estaba ayudandome a relajarme. Queria volver a la mesa y unirmeles. Pero ese era un lujo que yo no tenía como guardiana.
Mi primer deber era proteger a los Moroi y no entregarme a mis propios impulsos. Una y otra vez repetí el mantra de la guardia: Ellos son lo mas importante. Esas palabras de verdad estaban comenzando a molestarme.



Traducido por el Foro de Purple Rose, gracias a Caty, Sky y Elizabeth

domingo, 3 de mayo de 2009

Capítulo 22 traducido por Lala

El terror y la consternación me consumían, por mucho que pensé que mi alma se estaba asfixiando, el mundo terminaría bien a continuación. Porque seguramente, no cabe duda que yo no podría seguir adelante después de esto. Nadie podría seguir adelante después de esto. Quería gritar mi dolor al universo. Quería llorar hasta que me derritiera. Quería hundirme junto a Maison y morír con él. Ella me liberó, aparentemente la decisión no planteaba ningún peligro dado que yo me encontraba entre ella e Isaiah.Ella se volvió hacía el cuerpo de Mason.Yo dejé de sentir. Simplemente actué.
-No…lo…toques.-No pude reconocer mi propia vozElla volteó sus ojos.
-Llevas bien el dolor, estas molesta. Yo acabo de empezar a entender el punto de vista de Isaiah. Tú necesitas sufrir antes de morir.Alejándose, ella se arrodilló en el piso y le dio la vuelta al cuerpo de Mason.
- NO LO TOQUES!! – le grité-La empujé, con muy poco resultado. Ella me empujó de vuelta, cercanamente golpeándome. Y eso era todo lo que yo podía hacer, mantener mis pies en el suelo y estar quieta en posición vertical.Isaiah miró con divertido interés, pero entonces su mirada cayó al suelo. El chokti de Lissa se me había caído fuera del bolsillo de mi abrigo. El lo recogió. Strigoi podía tocar objetos sagrados. Las historias acerca de ellos temiendo cruces no eran ciertas. Simplemente ellos no podían entrar en tierra santa.
Él le dió la vuelta a la cruz y pasó sus dedos por el dragón que estaba grabado allí.-Ah , el dragomirs. – Él susurro – Me había olvidado de ellos. Fácil. Aquí hay qué, una? Dos de ellos a la izquierda? Apenas vale la pena recordar.Sus horribles ojos rojos se enfocaron en mi.
-¿Conoces alguno de ellos? Voy a tener que ver alguno en estos días, no será muy difícil.De repente, oí una explosión. El acuario había estallado y el agua salía disparada de él, rompiendo el vidrio. Fragmentos de él volaron en mi dirección, pero escasamente lo noté. El agua se fundió en el aire, formando una desequilibrada esfera. Empezó a flotar. Hacia Isaiah. Sentí como mi mandíbula caía mientras miraba eso.Él miró también, más perplejo que asustado. Al menos hasta que vió su rostro envuelto y empezó a soforcarse.Al igual que las balas, la sofocación no podía matarlo. Pero podía causarle un infierno de la cantidad de molestias. Sus manos volaron a su cara, tratando desesperadamente de quitarse el agua de encima. Sus dedos simplemente se deslizaban. Elena se olvido de Mason y saltó a los pies de Isaiah.
-¿Qué es? – Ella gritó. Ella lo sacudió en un inútil esfuerzo de liberarlo. -¿Qué PASA?- Ella gritó de nuevo.Nuevamente yo no sentí. Simplemente actué.Mi mano se cerró alrededor de un largo pedazo de vidrio que se había roto del acuario. Fue un movimiento irregular pero muy fuerte, cortando mi mano.Seguí adelante y hundí el fragmento en el pecho de Isaiah, con el objetivo de darle en el corazón. Yo había trabajado muy duro para encontrar práctica.Isaiah emitió un grito que se ahogo en el agua y se derrumbó en el piso. Sus ojos se fueron hacia atrás como tachados por un inmenso dolor.Elena miraba, conmocionada, al igual que yo cuando Isaiah había asesinado a Mason. Isaiah no estaba muerto, por supuesto, pero él estaba temporalmente fuera del conteo. Su rostro claramente mostró que no había pensado que esto fuera posible.La cosa mas inteligente en ese momento habría sido correr hacia la puerta y a la seguridad del sol. En cambio, corrí en la dirección opuesta, hacía la chimenea. Agarré una de las antiguas espadas y regrese en busca de Elena. No tenía que ir muy lejos, ella misma se había recuperado y se dirigía hacia mi.Gruñendo con rabia, ella trató de apoderarse de mi. Yo nunca había entrenado con una espada, pero me habían enseñado a luchar improvisando con cualquier arma que pudiese encontrar.Usé la espada para mantener distancia entre nosotras, mis movimientos eran torpes, pero efectivos por el momento.
Colmillos blancos destellaban en su boca –Voy a hacer que tu … –Dijo
-Sufra? Pague? Me lamente de haber nacido? – Sugerí
Recordé los combates con mi mamá y como yo había ido a la defensiva todo el tiempo. Eso no funcionaría esta vez. Tuve que atacar. Seguí adelante, intenté enviar a tierra a Elena de un golpe. Ninguna suerte. Ella anticipó cada uno de mis movimientos.De repente, detrás de ella, Isaiah gimió y empezó a venir alrededor. Ella miró de nuevo, el mas pequeño de los movimientos me permitiría deslizar la espada en el pecho.Había cortado la tela de su camisa y rozado la piel pero nada mas. Sin embargo, Ella se acobardó y miró hacia abajo en pánico. Creo que la imagen del vidrio yendo a través del corazón de Isaiah aún estaba fresca en su mente.Y eso era lo que yo realmente necesitaba.Yo preparé toda mi fuerza, señalé la espada ….y pasó.La cuchilla de la espada golpeó la parte lateral de su cuello, duro y profundo.Ella dió un horrible, horrible grito, un grito que hizo erizar mi piel. Ella trato de avanzar hacia mi. Yo puse mis manos atrás y golpee de nuevo.Sus manos se aferraron a su garganta, y sus rodillas cedieron. Yo golpee y golpee. La espada cavaba cada vez mas profundo en su cuello. Cortar la cabeza de alguien fue mas duro de lo que pensaba, y la vieja y embotada espada no ayudaba mucho.Pero finalmente, gané suficiente control para lograr que ella no realizara ningún movimiento. Y su cabeza estaba allí, separada de su cuerpo. Sus ojos muertos mirándome, como si no pudieran creer lo que había sucedido.Alguien estaba gritando, y por un surrealista segundo, pensé que todavía era Elena. Entonces levanté mis ojos y miré a través de la sala. Mia estaba en el camino de la puerta, sus ojos estaban sorprendidos, y su piel tenía un tinte verde que parecía que fuese a vomitar. De lejos, en la parte de atrás de mi mente, me di cuenta que ella era quién había hecho explotar el acuario.La magia del agua, aparentemente no fue inútil después de todo.Todavía un poco conmocionado, Isaiah intentó estar a la altura de sus pies. Pero yo estaba en él antes de que pudiera realizar alguna acción.La espada cantó, causando sangre y dolor con cada golpe. Me sentí como una vieja pro. Isaiah cayó al suelo. En mi mente, mantuve la imagen de él rompiendo el cuello de Mason.Y empuje y empuje tan fuerte con pude. Tan ferozmente, como si esa fuera una forma de borrar mi memoria.
-Rose! Rose!A través de mi odio, que parecía una espesa neblina, yo apenas podía detectar la voz de Mia-Rose! Está muerto.Despacio, líricamente, mantuve atrás mi próximo golpe y miré abajo, su cuerpo y la cabeza definitivamente no estaba junto a él. Ella tenía razón. Él estaba muerto. Muy, muy muerto.Miré en el resto de la habitación, había sangre por todas partes. Pero el horror de lo sucedido no estaba realmente registrado conmigo. Mi mundo se había ralentizado, disminuyó a dos tareas muy simples. Matar a los Strigoi. Proteger a Mason. No podía procesar nada más.-Rose- Susurró Mia.Ella temblaba, sus palabras estaban llenas de temor. Tenía miedo de mi, no de los Strigoi.-Rose, tenemos que irnos. Vamos.Arrastré mis ojos lejos de ella y miré hacia abajo, a los restos de Isaiah. Después de varios momentos, me dirigí hacia el cuerpo de Mason, todavía agarrando la espada.-No, no puedo dejarlo. Otro Strigoi podría venir.Mis ojos quemaban por las incontenibles ganas que tenía de llorar. No podía decirlo con seguridad. La sed de sangre me consumía, violencia y rabia eran las únicas emociones que era capaz de sentir.-Rose, volveremos por él. Si otros Strigoi están llegando tenemos que irnos.-No- repetí, ni siquiera mirándola a ella. – No lo estoy dejando a él, yo no lo dejaré solo.Con mi mano libre acaricié el cabello de Mason.-Rose…Giré mi cabeza – Fuera!!- Le grité – Vete y déjanos solos.Ella dio unos cuantos pasos adelante, y yo levanté la espada. Ella se congeló.-Vete – repetí – Ve a buscar a los otros.
Poco a poco Mia dio la vuelta camino a la puerta. Ella me dirigió una última y desesperada mirada antes de correr hacia afuera.Caí en el silencio. Me relajé aferrándome a la espada pero me negué a soltarla. Mi cuerpo se hundió hacia adelante y mi cabeza descansaba sobre el pecho de Mason. Intenté olvidar todo: El mundo que me rodea, el tiempo en si mismo. Segundos pudieron haber pasado. Horas pudieron haber pasado. Yo no sabía. Yo no sabía nada excepto que no podía dejar solo a Mason.Yo me encontraba en un estado muy alterado, un estado que solo mantenía el miedo y el terror en la raya. No podía creer que Mason estuviese muerto. No podía creer que lo hubiese convocado a la muerte. Yo podía negarme a reconocer algo, y pretender que nunca había ocurrido.Pasos y voces sonaron eventualmente, y levanté la cabeza hacia arriba. Personas entraron a través de la puerta, muchos de ellos. Yo no podía realmente hacer algo a cualquiera de ellos. Yo no lo necesitaba. Ellos estaban amenazados, y esas amenazas las usé para mantener a salvo a Mason de ellos. Un par de ellos se me acercó y yo salté arriba, levantando la espada y manteniéndola apuntando hacia su cuerpo.-Quédense atrás- Les advertí – Manténganse alejados de él.Siguieron llegando.-Que se queden atrás – Les grité. Ellos se detuvieron. Excepto por uno.-Rose – Era una voz suave. – Suelta la espadaMis manos temblaron. Yo tragué saliva. –Aléjate de nosotros!!-Rose.La voz habló de nuevo. Una voz que mi alma conocería en cualquier lugar. Vacilé, dejé a mi mente tomar conciencia de mi entorno, hundirme en los detalles. Dejé mis ojos fijos, analizando las características del hombre que tenía en frente. Los ojos marrones de Dimitri, suaves y firmes me miraron.-Está bien- él dijo- Todo va a estar bien. Puedes dejar la espada a un lado.Mis manos temblaron pero luché por mantener la espada empuñada. – No puedo –Las palabras herían conforme salían. – No puedo dejarlo solo. Tengo que protegerlo.-Tu tienes- Dijo élLa espada cayó de mis manos, aterrizando con un estruendo en el piso de madera. Yo seguí, colapsando, con el deseo de llorar que iba a estallar en cualquier momento.Los brazos de Dimitri me envolvieron como ayudándome a no caer en pedazos. Voces invadieron nuestro alrededor, y una a una las fui reconociendo, personas de confianza. Él intento llevarme hacia la puerta pero me rehusé a moverme todavía. No podía. Mis manos embragaron su camisa, arrugando la tela. Manteniendo un brazo alrededor de mi, él apartó mi pelo liso de mi cara. Incliné mi cabeza contra él, y siguió acariciando mi cabello. Murmuro algo en ruso.Yo no entendí una palabra de eso, pero el tono suave en que lo dijo me hacía sentir aliviada.Los demás guardianes se fueron extendiendo alrededor de la casa, examinándola centímetro a centímetro. Un par de ellos se acercaron a nosotros y se arrodillaron a ver los cuerpos. Me rehusé a mirar.-Ella hizo esto? Dos de ellos?-Esa espada no había sido usada en añosUn divertido sonido apretó mi garganta, Dimitri apretó mi hombro confortablemente.- Sácala de aquí Belikov – Oí decir a una mujer detrás de él. Su voz me era familiar.Dimitri apretó mi hombro de nuevo –Vamos Roza, Es hora de irnos
.Esta vez. Me fui. Él me guió hasta fuera de la casa, apretándome y yo no sabía como podía dar cada agonizante paso. Mi mente seguía negándose a procesar realmente lo que había sucedido. No podía hacer mucho más que seguir instrucciones simples de direcciones de las personas que estaban a mi alrededor. Eventualmente terminé en uno de los jets de la academia. Los motores rugieron alrededor de nosotros, y el avión fue levantado.Dimitri murmuró algo acerca de que volvería en breve y me dejó sola en mi asiento. Me puse recta y empecé a analizar los detalles del asiento de enfrente. Alguien se sentó al lado de mí y cubrió con una manta blanca mis hombros. Justo en ese instante me di cuenta que estaba temblando.Me arropé con la manta.Tengo frío –dije -¿Cómo puedo tener tanto frío?Estas en estado de shock –Respondió Mía.
Me volvi a mirarla, estudiando sus rizos rubios y sus grandes ojos azules. Algo mientras la veía a ella desencadenó mis recuerdos. Y todo cayó de nuevo. Cerré los ojos y los apreté fuerte.-Oh! Dios –respiré. Abrí mis ojos y me concentré en ella. – Tu me salvaste, me salvaste cuando hiciste explotar el acuario. No deberías haberlo hecho. No deberías haber vuelto.Ella se encogió de hombros –Tu no deberías haber ido por la espada.El punto justo.-Gracias-Le dije- Lo que hiciste…yo nunca habría pensado eso. Fue brillante.-Yo no sé acerca de eso – Ella reflexionó, sonriendo tristemente. –El agua no es tanto un arma, recuerdas?Me ahogué en una risa, aunque realmente no podía entender por qué esas palabras me parecían graciosas. Ya no.-El agua es un gran arma –Le dije finalmente.- Cuando volvamos vamos a tener práctica en la manera de usarla.Su rostro se iluminó. Un brillo se asomó en sus ojos.-Me gustaría. Más que nada.-Lo siento. Acerca de tu madre.Mia simplemente asintió. –Tu eres afortunada por tener a la tuya. No saber qué suerte tienes.Me volví y miré el asiento de nuevo. Las siguientes palabras que salieron de mi boca me asustaron – Desearía que ella estuviera aquí.-Ella está-dijo Mia, sonando sorprendida.-Estaba con el grupo que allanó la casa, no la viste?Sacudí mi cabeza. Caímos en un silencio. Mia se levantó y se fue. Un minuto más tarde alguien se sentó a mi lado.-Rose – dijo mi madre. Por primera vez en mi vida, ella sonaba insegura de sí misma. Miedo, quizá. – Mia dijo que querías verme.Yo no respondí. Ni siquiera la miré. –¿Que…que necesitas?-titubeó.Yo no sabía lo que necesitaba. Yo no sabía qué hacer. El ardor en los ojos creció insoportablemente, y antes de que me diera cuenta….ya estaba llorando. Grandes, dolorosos sollozos ocupaban mi cuerpo. Las lágrimas que había estado frenando se vertían ahora por todo mi rostro. El miedo y el dolor que me había negado a dejar que me consumieran habían explotado…quemando mi pecho. Apenas podía respirar.Mi madre puso sus brazos alrededor de mí y con mi cara enterrada en su pecho, sollozar era aún más difícil.-Lo sé – dijo ella suavemente –apretándome – Lo entiendo.

Capítulo 5 // Shadow Kiss // Vampire Academy 3



La mayoría de los asuntos disciplinarios en la academia eran para la Directora Kivora. Ella supervisaba Moroi y Dhampir por igual y era conocida por su creativo y amplio repertorio de castigos… ella no era cruel, exactamente, pero tampoco era suave. Ella simplemente toma el comportamiento del estudiante enserio y lo trata de la manera en la forma en que ella lo considere oportuno.

Habían algunos asuntos, sin embargo, que estaban fuera de su jurisdicción.

Los guardianes de la academia fueron llamados juntos a una comisión disciplinaria por los acontecimientos ocurridos, pero esto era muy, muy raro. Tú tendrías que hacer algo realmente grave como para irritarlos y tener este tipo de respuesta. Como, digamos, poner a un Moroi en peligro voluntariamente. O dejar a un Moroi en peligro hipotéticamente.

“Por última vez” gruñí “No lo hice a propósito”

Me senté en uno de las salas de reunión de los guardias, encarando al comité: Alberta, Emil, y uno de las raras guardianes femeninas en el campus, Celeste. Ello se sentaron en una mesa larga, mirando imponentemente, mientras que yo estaba sentada en una silla sola sintiéndome muy vulnerable. Otros distintos guardias estaban sentados observando, pero por suerte, ninguno de mis compañeros estaba ahí para ver esta humillación. Dimitri se encontraba entre los que observaban. El no estaba entre la comisión y me pregunte si lo mantuvieron fuera debido a su potencial papel como mi mentor.

“Señorita Hathaway” dijo Alberta, en una forma completamente estricta como una capitana, “Tu debes saber porque tenemos dificultades en cree eso”

Celeste asintió. “El guardián Alto la vio. Usted se negó a proteger a dos Moroi- incluido el que le fue asignado para que protegiera.”

“Yo no me negué” exclame “Yo…perdí el objetivo.”

“No fue un error de objetivo” Stan dice a la audiencia. El dio un vistazo a Alberta para poder tener permiso de hablar. “¿Puedo?” Ella asintió y el se giro hacia mi “Si usted me hubiera bloqueado o atacado y hubiera fallado, ese sería un error de objetivo. Pero usted no me bloqueo, usted no ataco. Ni siquiera lo intento. Usted justamente estaba ahí como una estatua y no hizo nada.”

Comprensiblemente, yo estaba indignada. El pensamiento de que yo abandonara a propósito a Christian y a Brandon para ser “asesinados” por un Strigoi era ridículo. Pero que podría hacer? Yo no podía confesar que fracase completamente por haber visto un fantasma. Ninguna opción era lo suficientemente coherente, pero tenía que escoger una que no fuera tan mala. Una me hacía parecer incompetente. La otra me hacía parecer una loca. Yo no quería estar asociada a ninguna de ellas. Prefería mucho más mi usual descripción de “imprudente” e “inquietante”.

“Porque estoy teniendo problemas solo por haber fallado?” Pregunte firmemente. “Quiero decir yo vi a Ryan fallar antes. Y no tuvo ningún problema. Acaso no es ese el punto de todo este ejercicio? La practica? Si fuésemos perfectos, ustedes ya nos habrían dejado ir sobre el mundo.”

“Se está escuchando?” dijo Stan. Juro que pude ver una vena palpitando en su frente. Creo que él era el único aquí que estaba tan molesto como yo. A menos era el único (aparte de mi) que demostraba sus emociones. Los otros llevaban cara de póquer, pero, ninguno de ellos había sido testigo de lo que había sucedido. Si yo hubiese estado en el lugar de Stan, podría haber pensado también lo peor de mí. “Usted no fallo, porque “fallar” implica que tú en realidad hubieses hecho algo.”

“Ok, entonces, me congele. “Lo mire desafiantemente. “¿Esto cuenta como haber fallado? No aguante la presión y me paralice. Resulta que no estaba preparada. El momento vino y entre en pánico. Esto le pasa a todos los novatos.”

“¿A un novato que ya ha matado a un Strigoi?” Emil pregunto. El era de Rumania, su acento era un poco más fuerte que el Ruso de Dimitri. “Parece poco probable”.

Les di una mirada furiosa a todos en la sala “Oh, ya veo. Después de un incidente, ahora esperan que sea un asesino experto de Strigoi? ¿No puede entrar en pánico, tener miedo o algo asi?. Tiene sentido. Gracias chicos. Es Justo. Realmente justo. Me hundí en mi asiento con los brazos cruzados sobre el pecho. No había necesidad de parecer como una pretenciosa. Ya tenía bastante con que lidiar.

Alberta suspiro y se inclino hacia delante. “No estamos discutiendo semántica. Los detalles técnicos no son el punto ahora. Lo que es importante es que esta mañana usted dejo muy claro que no quería proteger a Christian Ozera. De hecho…creo que usted incluso quiso que nosotros estuviésemos seguros en saber que usted hacia esto en contra de su voluntad y que nosotros pronto veríamos que esto había sido una terrible idea.” Ugh. Yo había dicho eso. Honestamente en que había estado pensando? “Y luego, cuando la primera prueba tuvo lugar, te encontramos completamente y totalmente indiferente”.

Casi caigo de la silla. “Es eso de lo que se trata? Ustedes piensan que no lo protegí debido a algún tipo de extraña venganza? “

Los tres ellos me miraban expectantes.

“Usted no es precisamente conocida por aceptar las cosas con calma y gracia cuando no le gustan.” Contesto ella irónicamente.

Esta vez, de pies, señale con mi dedo en forma acusatoria. “No es cierto, yo he seguido cada norma que Kivora me impuso desde que regrese aquí. He ido a cada práctica y he obedecido cada toque de queda. “Bueno me he burlado algunos toques de queda pero no intencionalmente. Siempre era para un hacer un bien mayor.“No existe ninguna razón para que yo hiciera eso como un tipo de venganza! Que aria de bueno esto? Sta- el guardián Alto no le aria realmente daño a Christian, entonces no es como si yo realmente quisiera verlo hecho polvo o algo así. La única cosa que puedo lograr es ser arrastrada en medio de algo como esto y posiblemente, ser excluida de la experiencia de campo.”

“Usted está a punto de ser excluida de la experiencia de campo.” Contesto Celeste sin rodeos.

“Oh” , me senté. De repente no sintiéndome tan valiente. El silencio cayó en la sala por varios minutos, y entonces escuche la vos de Dimitri hablar detrás de mí.
“Ella tiene un punto” dijo él. Mi corazón se acelero fuertemente sobre mi pecho. Dimitri sabía que yo no tomaría venganza de esa forma. El no pensaba que yo era una niña pequeña. “Si ella fuese a protestar y tomar venganza, ella lo haría de un modo diferente.” Bien, no demasiado pequeña, al menos.
Celeste frunció el ceño. “Si, pero después de la escena que ella hizo esta mañana…”
Dimitri dio unos cuantos pasos al frente y se coloco al lado de mi silla. Estando cerca de su solida presencia me confortaba. Tuve un de javu, de cuando Lissa y yo habíamos vuelto a la academia el otoño pasado. La directora Kivora casi me había expulsado, y Dimitri me había defendido también en ese momento.
“Todo esto es circunstancial” dijo. “Independientemente de la forma en la que ella parezca sospechosa para ustedes, no hay pruebas. El excluirlá de la experiencia-y arruinar eventualmente su graduación-es un poco extremo con certeza.”
La comisión parecía pensativa, y yo concentre mi atención en Alberta. Ella tenía la mayor parte de poder y decisión aquí. Ella siempre me había gustado y en nuestro tiempo juntas, siempre había sido estricta, pero siempre muy justa. Esperaba que eso todavía fuese verdadero.
Ella llamo a Celeste y Emil hacia ella y los otros dos guardianes se inclinaron más cerca. Ellos tenían una conferencia en susurros. Alberta dio un asintió en forma resignada y los otros dos regresaron a sus posiciones.
“Señorita Hathaway, le gustaría a usted decirnos algo antes de que demos nuestras conclusiones?”
“Que si me gustaría decir algo?” Infiernos, que sí. Tengo toneladas de cosas. Quería decir que yo no era incompetente. Quería decir que yo era uno de los mejores novatos aquí. Quería decir que yo había visto llegar a Stan y estar a punto de reaccionar. Sobre todo quería decirles que yo no quería tener este problema en mis registros. Incluso si no me excluyen de la práctica de campo yo esencialmente tendría una “ F” como nota por mi primer prueba. Esto afectaría todas mis calificaciones y posteriormente podría afectar mi futuro.Pero de nuevo tenia elección? Decirles que yo había visto un fantasma? El fantasma de un chico que había estado enamorado de mi y que probablemente había muerto por causa de ese enamoramiento? Yo aun no sabía que eran estas visiones. Creía que habían sido producido por el agotamiento- pero yo lo había visto a él- o a eso- dos veces ahora. Era real? Mi lógica decía que no, pero honestamente, eso no importaba en este momento. Si el fuese real y les dijese a ellos, pensarían que yo estaba loca. Si él no fuese real y les dijese, ellos pensarían que yo estaba loca también- y ellos estarían en lo cierto. No había forma de ganar aquí.
“No, guardián Petrov” dije, esperando sonar de forma humilde. “Nada más que agregar”
“Muy bien” dijo de cansadamente. “esto es lo que hemos decidido. Tiene suerte que el guardián Belikov haya intercedido por usted, o esta decisión podría haber sido completamente diferente. Te estamos ofreciendo el beneficio de la duda. Usted puede continuar en la experiencia de campo y seguirá protegiendo al Señor. Ozera. Estará en un periodo de prueba.”
“Está bien” dije. Yo había estado en periodos de prueba la mayor parte de mi vida académica. “Gracias”.
“Y” ella añadió. Uh-oh. “Debido a que las sospechas aun no han sido totalmente retiradas, usted deberá pasar sus días libres esta semana haciendo servicio comunitario.”
Salte de mi silla de nuevo. “¿Qué?”
La mano de Dimitri envolvió mi muñeca, con sus dedos calientes y controladores.
“Siéntate” el murmuro en mi oído, moviéndome hacia la silla. “Esto es lo que usted consigue”
“Si esto es un problema, podemos hacerlo la próxima semana también.” Advirtió Celeste. “Y las siguientes cinco semanas después de esto.”
Me senté y negué con la cabeza, “Me disculpo. Gracias”
La audiencia se disperso, y yo me sentí cansada y derrotada. Había pasado apenas solo un día? Seguramente el entusiasmo y la felicidad que había sentido antes de la experiencia de campo fue semanas atrás y no esta mañana. Alberta me dejo ir y encontrar a Christian, pero Dimitri pregunto si él podía tener un tiempo a solas conmigo. Ella estuvo de acuerdo, sin duda esperaba que el me diera un buen sermón y me pusiera de nuevo sobre el buen camino.
La sala estaba vacía, y pensé que él se sentaría y se dirigiría a mí en ese momento, pero en cambio se dirigió a una pequeña mesa donde se encontraba un dispensador de agua, café y otras bebidas.
“Quieres un poco de chocolate caliente?” el pregunto.Yo no había esperado esto.
“Claro”.El añadió cuatro paquetes de chocolate instantáneo en dos tazas descartables y luego agrego agua caliente.
“Colocar dos paquetes es el secreto” dijo, cuando las tazas estaban llenas.
El me dio el mío, con un agitador de madera, y luego se dirigió hacia la puerta lateral. Suponiendo que él no se detendría, me apresure a alcanzarlo intentando no derramar mi chocolate.
“Donde estamos- oh”Di un paso hacia la entrada y me encontré con un pequeño pórtico hecho de cristal lleno de pequeñas mesas. No tenía idea que ese pórtico se encontraba a un lado de la sala de reuniones, entonces, este era el lugar en donde los guardianes conducían todos los asuntos del campus. Era raro que se les permitiera a los novatos verlo. Así mismo no había comprendido que el edificio fue construido en torno a un pequeño patio y que era lo que este pequeño pórtico parecía. En el verano, me imaginaba que uno podría abrir las ventanas y estar rodeado de la vegetación y del aire caliente. Ahora, el pórtico se encontraba cubierto de hielo, y me sentía como si estuviese en una especie de palacio de hielo.
Dimitri pasa su mano por una silla, removiendo el polvo. Yo hice lo mismo y me senté frente a él. Aparentemente este lugar no era muy utilizado durante el invierno. Debido a que el cuarto había permanecido cerrado, este se encontraba un poco más caliente, pero no lo suficiente. El aire se sentía frio y calenté mis manos sobre mi taza.
El silencio cayo entre Dimitri y yo. El único ruido provenía de mí soplando sobre mi taza de chocolate caliente. El siguió bebiendo de su tasa. El había estado matando Strigoi por año. Que era un poco de agua caliente aquí y ahí?.
En cuanto nos sentamos y el silencio creció, lo estudie por encima de mi taza. El no me miraba pero yo sabía que el compendia que yo lo estaba observando. Como todas las veces en que yo lo miraba, yo siempre era golpeada por su belleza primero. Su cabello negro y suave que el frecuentemente colocaba tras sus orejas sin darse cuenta, su cabello que nunca se mantenía detrás de su cuello. Sus ojos marrones que de alguna forma eran gentiles y feroces al mismo tiempo. Sus labios tenias esa misma cualidad contradictoria, comprendí que cuando el luchaba o trataba con algo severo, aquellos labios se tornaban planos y serios. Pero en momentos alegres…cuando el reía o besaba…bien, ahí estos eran suaves y maravillosos.Yo me sentía caliente y segura solo con estar junto a él. El trajo la tranquildad después de un terrible día.
Tan a menudo con otras personas, yo sentía la necesidad de ser el centro de atención, ser graciosas y siempre tener algo inteligente que decir. Era un habito que yo tenía que perder para ser una guardiana, para este trabajo el silencio era más que requerido.
Pero con Dimitri nunca sentía que tenía que ser alguien más de lo que ya era. Yo no tenía que entretenerlo o pensar en bromas o incluso coquetearle. Era lo suficiente el estar simplemente juntos, era completamente confortable la compañía de uno con el otro-aparte de la tensión sexual- en el cual perdíamos todo sentido de auto-conciencia. Yo exhale y bebí mi chocolate.
“¿Qué paso ahí?” el finalmente pregunto buscando mis ojos “Tú no has perdido debido a la presión”.
Su voz era curiosa, no acusatoria. Comprendí que él no me estaba tratando como un estudiante ahora. El me consideraba como un igual. El simplemente quería saber lo que estaba pasado conmigo. No había algún modo de disciplina o de sermón en su tono. Y esto justamente lo hizo todo peor cuando tuve que mentirle a él.
“No” dijo “No creo eso. Nunca lo hice. Yo sabía que tú serias infeliz cuando descubrieras las asignaciones, pero nunca puse en duda que tú harías lo necesario para protegerlo. Sabía que no dejarías a tus sentimientos personales interferir en el camino de tu deber.”
Mire de nuevo y encontré su mirada, tan llena de fe y absoluta confianza en mí. “Yo no… yo estaba enojada…todavía lo estoy un poco. Pero cuando yo dije que lo aria. Lo dije en serio. Y después de pasar algún tiempo con el…bueno, yo no lo odio. Creo que es bueno para Lissa, y él se preocupa por ella, entonces no puedo estar molesta sobre eso. El y yo no nos llevamos bien a veces, eso es todo…pero nosotros juntos realmente lo hicimos bien contra los Strigoi. Recordé cuando estuve con el hoy, y la discusión sobre esta tarea parecía estúpida. Entonces decidí hacer el mejor trabajo posible.”
Yo no quería hablar mucho, pero fue bueno dejar salir lo que guardaba dentro de mí y la mirada de Dimitri en mi me hacia decir cualquier cosa, casi cualquier cosa.
“¿Qué paso entonces?” pregunto “¿con Stan?”
Aparte mis ojos y jugué con mi taza de nuevo. Yo odiaba mantener secretos con él, pero no podía decirle nada acerca de esto. El el mundo Humano, los vampiros y dhampir son criaturas mitológicas y parte de historias a la hora de acostarse para asustar a los niños. Las personas no sabían que nosotros en realidad existíamos y que andábamos sobre la tierra. Pero solo porque nosotros existíamos no significaba que todas las historias de criaturas paranormales también lo fuesen. Nosotros también teníamos nuestros propios mitos e historias a la hora de dormir sobre cosas que no creíamos. Hombres Lobos, El coco, Fantasmas.
Los fantasmas no tenias un papel real en nuestra cultura, excepto para ser adornos en las noches de campamento y en travesuras. Los fantasmas aparecieron en Halloween , y de algunas leyendas durante años, Pero en la vida real? Nada de fantasmas. Si tu vuelves después de la muerte, era porque te convertiste en un Strigoi. Al menos, esto es lo que siempre me enseñaron, yo honestamente ahora no sabía lo suficiente para decir lo que estaba pasando. El haberme imaginado a Manson era lo más probable, a que este fuese un verdadero fantasma., pero hombre, esto quería decir que yo seriamente estaba dirigiéndome a territorio de locos. Todo este tiempo yo había estado preocupada que Lissa se perdiese así. ¿Quién diría que esa podría ser yo?
Dimitri estaba todavía observándome, a la espera de una respuesta.
“No sé lo que ocurrió ahí. Mis intenciones eran buenas… yo…yo solo me confundí.”
“Rose. Eres terrible para decir mentiras.”Eche un vistazo hacia él.
“No, no lo soy. He dicho muchas mentiras buenas en mi vida. Y las personas siempre las han creído.”
El rio ligeramente. “Estoy seguro. Pero eso no funciona conmigo. En primer lugar tu no me miras a los ojos. En cuanto a lo otro…. No lo sé. Solamente puedo percibirlo.
Infiernos. El podía percibirlo. El me conocía tan bien. Me levante y me fui directo a la puerta, manteniéndome de espaldas hacia él. Normalmente, apreciaba cada minuto con él, pero hoy no podría hacerlo. Odiaba mentir, pero no quería decir también la verdad. Tenía que marcharme.
“Mira, aprecio que estés preocupado por mí, pero… de verdad, está todo bien. Solo estoy confundida. Estoy avergonzado de esto- y siento haber estropeado el increíble entrenamiento que me diste-pero me recuperare. La próxima vez, el trasero de Stan será mío.”
Yo aun no lo había oído levantarse, pero de repente, Dimitri estaba atrás de mí.
El coloco una mano en mi hombro, y me congele frente a la puerta. El no me toco en ninguna otra parte y tampoco trato acercarme más hacia él. Pero, oh, aquella mano en mi hombro tenía todo el poder del mundo.
“Rose” dijo, y yo sabía que el ya no estaba sonriendo. “ Yo no sé porque tu estas mintiendo, pero sé que no lo harías sin una buena razón. Y si hay algo mal- algo que tienes miedo de decirle a los demás-“
Me gire rápidamente alrededor, de algún modo logrando que su mano no se moviese hacia mi otro hombro.
“No tengo miedo” le grite. “Tengo mis razones, créeme, lo que paso con Stan no ha sido nada. Realmente. Todo esto no es más que algo estúpido que se salió fuera de control. No sientas pena por mí o pienses que tienes que hacer algo. Lo que sucedió apesta, pero justo pasare por ello y lo tomare como una señal. Tendré cuidado de todo. Voy a cuidar de mi misma.”
Fue necesaria toda mi fuerza para no temblar. ¿Cómo había llegado este día a ser tan extraño y estar fuera de control?. Dimitri no dijo nada más. El solamente me observaba, La expresión en su cara era una que yo nunca antes había visto. Era de disgusto? Desaprobación? No podía descifrarla. Los dedos sobre mi hombre apretaron ligeramente y luego se relajaron.
“Tú no tienes que hacer esto sola.” Dijo finalmente. El sonaba casi ansioso, que no tenía sentido. Era él quien me había dicho durante mucho tiempo que tenía que ser fuerte. Yo quería lanzarme en sus brazos en ese mismo momento. Pero yo sabía que no podía hacerlo.No podía evitar sonreír.
“Tu lo dices asi…pero me dices la verdad. ¿Tu sales corriendo buscando ayuda cuando tienes problemas?”.
“No es lo mismo.-“
“Responde a la pregunta. Camarada”.
“No me llames asi.”
“Y no evites la pregunta tampoco”
“No” el dijo “Trato de resolver mis problemas yo solo”
Me deslice fuera de su mano
“Ves?”
“Pero tú tienes a muchas personas en tu vida en la cual puedes confiar, personas se preocupan por ti. Eso cambia las cosas.”
Le mire sorprendida. “Tú no tienes personas que se preocupan por ti?”.
El frunció el ceño, obviamente pensando mis palabras. “Bueno, siempre he tenido personas buenas en mi vida…y hay personas que se preocupan por mí. Pero eso no significa necesariamente que yo pueda confiar en ellos o decirles todo.”
Frecuentemente me distraía la rareza de nuestra relación que rara vez pensaba en Dimitri como alguien que poseía una vida fuera de mi. Era respetado por todos en el campus. Profesores y estudiantes lo conocían como uno de los más mortíferos guardianes aquí. Siempre que se encontraba con guardianes fuera de la academia, ellos siempre parecían conocerlo y respetarlo. Pero yo no recuerdo haberlo visto en algún tipo de evento social. No parecía tener una estrecha amistad con otros guardianes. Lo más amigable que yo lo había visto estar con alguien era con la tía de Christian, Tasha Ozera, cuando lo había visitado.
Ellos se conocían hace mucho tiempo, pero aun así no había sido lo suficiente como para conseguir que Dimitri la siguiera después que ella finalizo su visita.
“¿Confías en mi?” le pregunte.
Su indecisión fue breve. “Si”
“Entonces confía en mi ahora y no te preocupes por mi esta vez.”
Camine lejos, fuera del alcance de su brazo, y el no dijo nada más y tampoco trato de detenerme. Pase atreves de la sala en donde tuve la audiencia, me dirigí hacia la salida principal del edificio, tirando los restos de mi chocolate caliente a un cubo de basura mientras salía.
Traducido por el Foro de Purple Rose, gracias a Elizabeth, Sky y Caty

Capítulo 21 traducido por Jen

No necesitaba saber eso ahora. Podría manejar cualquier cosa que Adrian hiciese: que la golpeara, que la convirtiese en una fumadora, daba igual. Pero eso no. Que Lissa dejase las píldoras era exactamente lo que quería evitar. De mala gana dejé su cabeza y regresé a mi propia y sombría situación. Me hubiera gustado ver que más sucedida entre Adrian y Lissa, pero obsérvalos no me haría ningún bien. Bueno. Ahora realmente necesitábamos un plan. Necesitaba acción. Tenía que sacarnos de aquí. Pero, mirando alrededor, me di cuenta que estaba tan cerca de escapar como antes, y pasé las siguientes horas pensando y especulando. Hoy teníamos tres guardias. Parecían un poco aburridos pero no lo suficiente como para ser negligentes. Cerca, Eddie parecía estar inconsciente, y Mason miraba a la nada del suelo. Del otro lado, Christian también miraba a la nada y creo que Mia estaba durmiendo. Dolorosamente consciente de cuanto me dolía la garganta, casi me reí al recordar cuando le había dicho a ella que los usuarios de agua eran inútiles. Ellos podrían no ser buenos para una pelea, pero daría cualquier cosa para que ella invocase un poco de – Magia. Porque no lo pensé antes? No estábamos indefensos. No completamente. Un plan poco a poco se fue formando en mi mente - un plan que probablemente fuese una locura, pero también era el mejor que teníamos. Mi corazón latía rápidamente con anticipación, e inmediatamente calmé mis facciones antes de que los guardias notasen mi cambio de ánimo.Del otro lado, Christian me estaba mirando. Él había visto el breve brillo de la anticipación y se dio cuenta de que había pensado en algo. Me miraba con curiosidad, tan preparado como yo para la acción.Dios. ¿Cómo iba a hacerlo? Necesitaba su ayuda, pero no había una forma posible de contarle lo que estaba pasando por mi cabeza. En realidad, no estaba segura de que me pudiese ayudar - estaba bastante débil. Mantuve su mirada, intentando hacerle entender que iba a suceder algo. Su rostro estaba lleno de confusión, pero también de determinación. Después de asegurarme de que ninguno de los guardianes me estaba mirando, me giré lentamente, tirando un poco de mis manos atadas. Mire para detrás de mi, y después me encontré con la mirada de Christian. El frunció el ceño y yo repetí el gesto. "Ey", dije en voz alta. Mia y Mason dieron un salto de sorpresa. "Vais a dejar que nos muramos de hambre? No podemos por lo menos beber un poco de agua o algo? " "Cállate", dijo uno de los guardias. Esa era siempre respuesta que obteníamos cuando alguno de nosotros se aventuraba a hablar."Vamos." Usé mi voz más insultante. "Ni tan siquiera un traguito? Mi garganta se está quemando. Está prácticamente en llamas." Mis ojos se dirigieron a Christian mientras decía esas últimas palabras, y luego me giré de nuevo hacia el guardia. Como era de esperar, él se levantó de su silla y vino hacia mí. "No me hagas repetirlo", gruñó. No sabía si él haría algo violento, pero yo no tenía ningún interés en forzar nada todavía. Por otra parte, conseguí mi objetivo. Si Christian no me había entendido, no había nada más que pudiese hacer. Esperando verme con miedo, me callé. El guardia volvió a su silla, y después de un rato, dejó de mirarme. Miré a Christian y moví mis manos atadas de nuevo. Vamos, vamos, pensé. Entiéndelo de una vez, Christian.El de repente levantó sus cejas, y me miró sorprendido. Bien. Parecía haber entendido algo. Sólo esperaba que fuese lo que yo quería. Su mirada se convirtió en duda, y me miraba como si me estuviese preguntando si estaba hablando en serio. Asentí enfáticamente. Frunció el ceño durante algunos segundos y, a continuación, dio un gran y fuerte suspiro."Muy bien", dijo. Todo el mundo saltó de nuevo. "Cállate", dijo uno de los guardias automáticamente. Sonaba cansado. "No," dijo Christian. "Estoy listo. Preparado para beber". Todos en la sala se congelaron durante algunos segundos, incluida yo. Eso no era exactamente la que tenía en mente. El líder de los guardias se levantó. "No juegues con nosotros." "No lo estoy", dijo Christian. Tenía una febril y desesperada mirada en su rostro que no pensé que fuese totalmente falsa. "Estoy cansado de esto. Quiero salir de aquí, y no quiero morir. Voy a beber - y la quiero a ella." Hizo un gesto en mi dirección. Mia dio un grito alarmado. Mason le llamó a Christian algo que en la Academia le habría costado la expulsión.Esto definitivamente no era lo que tenía en mente. Los dos guardias miraron a su líder. "Deberíamos llamar a Isaiah?" le preguntaron. "No creo que él esté aquí", dijo el líder. Estudió a Christian durante algunos segundos y después tomó una decisión. "No quiero molestarlo, si se trata de una broma. Soltadlo y veremos". Uno de los hombres cogió unos alicates. Se fue hasta Cristian y se agachó. Escuché como algo se rompía, mientras las esposas se soltaban. Agarrando a Christian por los brazos lo trajeron hasta donde estaba yo."Christian", exclamó Mason, su voz llena de ira. Luchaba por soltarse de las esposas, balanceando la silla mientras lo intentaba. "Estás mal de la cabeza? No dejes que te hagan esto!" "Tienes que morir, pero yo no", dijo Christian, apartando su pelo negro de delante de sus ojos. "No tengo otra forma de hacerlo." No sabía lo que estaba sucediendo ahora, pero estaba segura de que debería mostrar miedo si se suponía que iba a morir. Dos guardias se situaron a los lados de Christian, observándolo atentamente mientras se acercaba a mí. "Christian", susurré, sorprendida de ver lo fácil que me resultaba parecer asustada. "No lo hagas". Sus labios se torcieron en una de esas sonrisas amargas que el hacia tan bien. "Tú y yo nunca nos llevamos bien, Rose. Si tengo que matar a alguien, es mejor que seas tu." Sus palabras eran frías, precisas. Creíbles. "Además, pensé que lo querías". "Eso no. Por favor, no-" Uno de los guardias empujó a Christian. "¡Apúrate o te volveré a atar en la silla". Incluso con esa sonrisa negra, Christian se encogió de hombros. "Lo siento, Rose. Vas a morir de todos modos. ¿Por qué no, por una buena causa?" Él puso su cara cerca de mi cuello. "Probablemente te dolerá", añadió. Realmente lo dudaba... si realmente lo fuese a hacer. Porque no iba... ¿verdad? Me puse nerviosa. Por todos los medios, si te chupan la sangre, con la saliva te pasan las endorfinas, las suficientes para que no sientas casi nada de dolor. Era como irse a dormir. Aunque, naturalmente, todo esto era especulación. Las personas asesinadas por las mordidas de los vampiros no regresan para contarnos como era. La nariz de Christian tocó mi cuello, movió su cara hacia abajo para que estuviese totalmente oculta. Sus labios rozaban mi piel, tan suavemente como lo había sentido cuando el y Lissa se besaban. Un segundo después, sus colmillos tocaron mi piel. Después sentí dolor. Mucho dolor. Pero no se debía al mordisco. Sus dientes sólo estaban presionados contra mi piel; no la perforaban. Su lengua se movía contra mi cuello, lamiendo, pero no había sangre para chupar. En todo caso, se parecía más bien a un extraño y retorcido beso.No, el dolor venía de mis muñecas. Un dolor que quemaba. Christian estaba canalizando su magia para quemas las esposas, así como yo quería. Había entendido el mensaje. El plástico estaba cada vez más caliente, mientras el fingía que estaba bebiendo. Cualquier persona que mirase más de cerca sabría que estaba fingiendo, pero mi pelo estaba bloqueando la vista de los guardines. Sabía que era difícil derretir el plástico, ahora lo había entendido, había entendido realmente lo que significaba. La temperatura necesaria para hacerle algún daño. Era como poner mis manos en la lava. Las esposas quemaban mi piel, caliente y horrible. Me torcí, con la esperanza de que eso pudiese aliviar el dolor. Pero no funcionó. Me di cuenta, sin embargo, que las esposas habían cedido un poco cuando me había movido. Estaban blandas. Vale. Eso ya era algo. Sólo tenía que aguantar un poco más. Desesperadamente, intenté centrarme en la mordida de Christian y así distraerme. Funcionó durante cinco segundos. El no me estaba dando muchas endorfinas, no las suficientes como para combatir el horrible dolor creciente. Lloriqueé, haciéndome parecer más convincente. "No lo puedo creer", murmuró uno de los guardias. "Realmente lo está haciendo." Por detrás de ellos, escuché a Mia llorar. La quemadura aumentó. Nunca había sentido algo tan doloroso en mi vida, y ya había pasado por muchas cosas. El desmayo pronto se convirtió en una posibilidad. "Ey", uno de los guardias dijo finalmente. "¿Qué es ese olor?" Ese olor era el plástico derretido. O quizás mi piel derretida. Honestamente, no me importó, porque cuando moví mis muñecas, pude romper las esposas. Tenía 10 segundos de sorpresa, y los aproveché. Me levanté, empujando a Christian en el proceso. Tenía un guardia a cada lado, y uno de ellos aún sujetaba los alicates. En un solo movimiento, le quité los alicates y se los clavé en la mejilla. Él dio una especie de grito gorjeado, pero no esperé para ver que pasaba. El efecto sorpresa se estaba acabando y no podía perder tiempo. Tan pronto como solté los alicantes, le dí un puñetazo al otro. Por regla general mis patadas eran más fuertes que mis puñetazos, pero lo golpeé con la suficiente fuerza como para asustarlo y hacerlo tambalear. Pero entonces el jefe de los guardias entró en acción. Y como me temía, que él aún tenía la pistola, y él la estaba usando. "¡Alto!" Gritó, apuntándome. Me congelé. El tipo al que había golpeado, se acercó y me agarró del brazo. Cerca de allí, el que había apuñalado gemía en el suelo. Aún con la pistola apuntándome, el líder comenzó decir algo y, a continuación, gritó alarmado. El arma de repente se puso naranja y la dejó caer. Donde el la había agarrado, la piel se le puso roja e irritada. Christian había calentado el metal. Si. Definitivamente deberíamos haber utilizado magia desde el principio. Si salíamos de esta, apoyaría la causa de Tasha. La costumbre anti-magia de los Moroi, estaba tan gravada en nuestra mente que ni tan siquiera habíamos pensado en usarla antes. Era una estupidez. Me giré hacia el tipo que me estaba agarrando. Creo que él no espera que una chica de mi tamaño fuese capaz de luchar, y además aún estaba medio aturdido con lo que le había sucedido al tipo que había estado sujetando el arma. Conseguí espacio suficiente para patearle en el estomago, una patada que me habría valido un aprobado en la clase de combate. Gimió que con el impacto, le dí con tanta fuerza que lo empujé contra la pared. En un segundo, estaba encima de él. Agarrando un puñado de su pelo, le golpeé la cabeza contra el suelo lo suficientemente fuerte como para hacerle perder el conocimiento.Inmediatamente, me giré, sorprendida por el líder no hubiese venido por mí aún. No debería haberle llevado tanto tiempo recuperarse de la conmoción de la pistola. Pero cuando me giré, la habitación estaba tranquila. El líder estaba inconsciente en el suelo - con un nervioso Mason encima de él. Cerca, Christian tenía los alicates en una mano y en la otra la pistola. Todavía debería estar caliente, pero sus poderes lo hacían inmune. Estaba mirando al hombre al que yo había apuñalado. El tipo no estaba inconsciente, apenas sangraba, pero como yo había hecho, se congeló cuando vio el arma. "Mierda", murmuré, observando la escena. Caminando hacia Christian, levanté la mano. "Dame eso antes de que lastimes a alguien." Esperaba una mirada amarga, pero sólo me dio el arma con sus manos temblorosas. La metí en mi cinturón. Mirándolo más de cerca, vi lo pálido que estaba. Parecía que se iba a desmayar en cualquier momento. Había hecho mucha magia para alguien que llevaba dos días pasando hambre. "Mase, coge las esposas", dije. Sin girarse, Mason dio unos pasos hacia atrás, hasta donde estaba la caja donde los secuestradores tenían esposas nuevas. Había algunas tiras de plástico y otra cosa. Con una mirada cuestionadora, cogió el rollo de cinta adhesiva. "Perfecto", le dije. Prendimos a los secuestradores en las sillas. Uno estaba consciente, pero le hicimos perder el conocimiento y les pusimos la cinta en la boca. Se despertarían dentro de poco, y no queríamos que hiciesen ruido. Después de liberar a Mia y a Eddie, los cinco nos reunimos y planeamos nuestro próximo movimiento. Christian y Eddie apenas podían mantenerse de pie, pero al menos Christian sabía dond estaba. El rostro de Mia estaba lleno de lágrimas, pero aun así sospechaba que sería capaz de cumplir ordenes. Eso, nos dejaba a Mason y a mí, como los únicos que podían hacer algo."El reloj de aquel tipo indica que es de mañana", dijo. "Lo que tenemos que hacer es ir al exterior, y no podrán tocarnos. Si es que no hay mas humanos". "Dijeron que no Isaiah no estaba", dijo Mia. "Deberíamos ser capaces de salir, ¿verdad?" "Estos hombres no se han movido de aquí en horas", le dije. "Pueden estar equivocados. No podemos hacer algo estúpido. " Cuidadosamente, Mason abrió la puerta de nuestra habitación y miró el corredor vacío. "Crees que habrá alguna manera de salir aquí?""Eso facilitaría nuestras vidas", murmuré. Miré a los demás. "Quedaos aquí. Nosotros comprobar el resto del sótano." "Y si viene alguien?" Exclamó Mia. "No vendrán", le aseguré a ella. En realidad no estaba segura de que no hubiese nadie más, tendrían que haber venido corriendo con todo el ruido que hicimos. Y si alguien trataba de bajar las escaleras, nosotros los escucharíamos primero. Aun así, Mason y yo nos movimos cuidadosamente mientras evaluábamos el sótano, cubriéndonos mutuamente y mirando en todas las esquinas. Era un laberinto de ratas como recordaba de cuando nos habían capturado. Muchos corredores y habitaciones. Una por una, abrimos todas las puertas. Cada habitación estaba vacía, salvo por alguna silla ocasional. Me estremecí, pensando que todas aquellas habitaciones probablemente eran utilizadas con otros prisioneros. "No hay una maldita ventana en todo el lugar", murmuré cuando acabamos la exploración. "Tenemos que subir". Regresamos a nuestra habitación, pero antes de que llegásemos, Mason agarró mi mano. "Rose..." Me detuve y le miré. "Sí?" Sus ojos azules, - eran más serios de lo que jamás los habían estado - me miraban con arrepentimiento. “La he jodido.” Pensé en todos los eventos que nos habían llevado a esta situación. "La hemos jodido, Mason. " Estuvo de acuerdo. "Espero que... Espero que cuando todo esto termine, todavía podemos sentarnos a hablar y arreglar las cosas. No debería haberme enfadado contigo. " Quería decirle que eso no iba a suceder, que cuando el desapareció, yo lo estaba buscando para decirle que las cosas no se solucionarían entre nosotros. Como este no era el momento ni el lugar para hablar de eso, le mentí. Le apreté la mano. "También lo espero". Él sonrió y regresamos junto a los otros. "Muy bien", les dije a ellos. "Esto es lo que haremos." Preparamos rápidamente un plan y nos dirigimos a las escaleras. Yo iba delante, seguida por Mia mientras que ella intentaba servirle de apoyo a un renuente Christian. Mason estaba en la retaguardia, arrastrando prácticamente a Eddie. "Debería ir adelante", murmuró Mason mientras estábamos en la parte superior de la escalera. "No", le respondí, poniendo las manos sobre la manilla de la puerta. "Sí, pero si algo pasa-", "Mason", le interrumpí. Lo miré, y de repente, tuve un flash de mi madre de cuando el ataque a los Drozvov había sido descubierto. Calmada y controlada, incluso el borde de algo horrible. Necesitaban un líder, al igual que nosotros, e intenté canalizar al máximo el comportamiento de mi madre. "Si algo sucede, los sacas de aquí. Corréis rápido y lejos. No vuelvas sin una multitud de guardianes". "Te atacarán a ti primero! ¿Qué debería hacer?" silbó. "Dejarte? " "Si. Te olvidas de mi y sales." "Rose, no voy-" "Mason." Pensé de nuevo en mi madre otra vez, luchando por aquella fuerza y el poder para dirigir a los demás. "Puedes hacerlo o no?" Nos miramos durante varios segundos, mientras los demás retenían el aliento. "Puedo hacerlo", dijo con dureza. Asentí y me giré. La puerta del sótano chirrió cuando la abrí, e hice una mueca debido al ruido. Sin ni siquiera atreverme a respirar, estaba completamente parada en la parte superior de las escaleras, esperando y escuchando. Esta casa y su decoración parecían la misma a la cual habíamos sido traídos. Cortinas oscuras tapaban las ventanas, pero en los bordes, pude ver la luz del sol. El sol nunca me había parecido tan bueno como me parecía en aquel momento. Alcanzarlo significaba la libertad. No había sonidos o movimientos. Mirando alrededor, intenté recordar dónde estaba la puerta. Al otro lado de la casa – realmente no era muy lejos, pero ahora parecía haber un abismo de distancia. "Explora conmigo", le susurré a Mason, con la esperanza de hacer que él se sienta mejor. Dejó que Eddie se apoyase en Mia por un momento y fue conmigo a hacer una rápida exploración del área. Nada. El camino está libre hasta la puerta frontal. Suspiré de alivioMason, cogió a Eddie de nuevo, y fuimos hacia adelante, todos tensos y nerviosos. Dios. Lo lograremos, me di cuenta. Realmente íbamos a lograrlo. No podía creer en nuestra suerte. Habíamos estado tan cerca del desastre - y apenas lo habíamos conseguido. Era uno de esos momentos que te hacen apreciar la vida y querer cambiar las cosas. Una segunda oportunidad que juras que no vas a desperdiciar. La conciencia de que -Escuché el movimiento casi al mismo tiempo que los vi delante nuestra. Era como si Isaiah y Elena hubiesen aparecido por arte de magia. Pero sabía que no se trataba de magia. Los Strigoi podían ser muy rápidos. Debían de haber estado del otro lado, el cual nosotros creíamos vacío – no habíamos querido perder tiempo extra buscando. Me enfadé conmigo misma por no haber comprobado que cada centímetro de todo el lugar. En algún lugar en el fondo de mi memoria, me oí hablar con mi madre en la clase de Stan: "Creo que metisteis la pata. ¿Por qué no buscaron por todo el lugar y si certificaron de que no había Strigoi antes de empezar a hablar? Se habrían librado de mucho problemas". El karma apesta. "Niños, niños" se burló Isaiah. "El juego no funciona así. Estáis rompiendo las reglas." Una cruel sonrisa apareció en sus labios. Nos encontraba divertidos y no una amenaza. Honestamente? Tenía razón. "Rápido y lejos, Mason," dije en voz baja, sin apartar la mirada de los Strigoi. "Bueno, bueno... si las miradas matasen..." Isaiah levantó las cejas cuando se le ocurrió algo. "¿Crees que nos puedes derrotarnos tu sola?" Él se rió. Elena se rió. Apreté los dientes. No, nunca había pensado que los pudiese derrotar. En verdad, estaba segura de que iba a morir. Pero estaba segura de que podría ofrecer una buena distracción. Di un paso hacia Isaiah, pero apunté con el arma a Elena. Puedes pillar a los humanos desprevenidos -, pero no a un Strigoi. Ellos habían visto mis intenciones incluso antes de que me empezase a mover. Sin embargo no esperaban que tuviese un arma. Y mientras Isaiah bloqueaba mi ataque sin apenas ningún esfuerzo, logré dispararle a Elena, antes de que el me quitase el arma. El ruido del arma resonó en mis oídos, y ella gritó de dolor y sorpresa. Había apuntado a su estomago, pero le había dado en una pierna. No es que importase. No la habría matado, pero en el estómago hubiese sido bastante más doloroso. Isaías agarraba mi muñeca con tal fuerza que pensé que podría romperme los huesos. Solté el arma. Esta chocó contra el suelo, rebotó y se deslizó hacia la puerta. Elena gritó de ira y me arañó. Isaiah le dijo que se controlase y me apartó de ella. Mientras tanto, me debatí todo lo posible, pero no para escapar, si no para centrar su atención en mi. Y entonces el más dulce sonido. La puerta abriéndose. Mason se había aprovechado de mi distracción. Salió con Chritian y Mia, apartándose de mí y de los Strigoi y yendo hacia la puerta. Isaiah se giró con aquella supervelocidad que tenía - y gritó cuando la luz del sol lo tocó. Pero incluso con él sufriendo, sus reflejos todavía eran rápidos. Se alejó de la luz, arrastrando Elena y a mí con el- a ella por el brazo, y a mi por el cuello. "Sácalos de aquí!" Grité. "Isaiah", comenzó Elena, soltándose. Él me empujó al suelo y miró a su alrededor, viendo que sus víctimas habían escapado. Tomé aire, ahora que el agarre de mi garganta se había soltado y miré a la puerta a través de mi cabello. Vi a Mason arrastrar a Eddie a la calle, en la seguridad de la luz. Mia y Christian ya habían salido. Casi lloré de alivio. Isaiah se giró hacia mí con la furia de una tormenta, los ojos negros y terribles mientras que se acercaba a mí con su gran altura. Su cara, que siempre había dado miedo, se convirtió en algo casi más allá de la comprensión. "Monstruoso" ni siquiera se le acercaba. Me levantó tirándome del pelo. Lloré de dolor, y él bajó su rostro para que pudiésemos mirarnos a la misma altura."¿Quieres una mordida, niña?" Exigió. "¿Quieres ser una ramera de sangre? Bueno, podemos hacer eso. En todo el sentido de la palabra. Y no será dulce. Y no será indoloro. Será muy doloroso - la coacción funciona de dos maneras, ya sabes, y me voy a asegurar de que sufras el peor dolor de tu vida. Y también me aseguraré de que tu muerte me lleve mucho, mucho tiempo. Gritarás. Llorarás. Me suplicarás que acabe con tu sufrimiento y te deje morir-" "Isaiah", exclamó Elena con exasperación. "Simplemente mátala de una vez. Si lo hubieses hecho antes, como te había dicho, nada de esto estaría pasando. " El continuó agarrándome, pero sus ojos se giraron hacia ella. "No me interrumpas". "Estás siendo melodramático," Continuó ella. Si, ella realmente era una reivindicadora. Nunca pensé que un Strigoi pudiese serlo. Era casi cómico. "Y derrochador." "Tampoco me contestes", dijo. "Tengo hambre. Estoy diciendo que deberíamos-" "Déjala en paz, o te mato." Todos nos giramos hacia la voz, una voz negra y llena de rabia. Mason estaba en la entrada, enmarcado por la luz, sosteniendo el arma que yo había dejado caer. Isaiah lo estudió por algunos segundos. "Claro", dice Isaiah. Parecía aburrido. "Inténtalo". Mason no dudó. Le disparó y continuó disparando hasta que vacío el cartucho en el pecho de Isaiah. Cada bala hizo que el Strigoi se encogiese un poco, pero fuera de eso, el seguía de pie, agarrándome. Eso es lo que significa ser un antiguo y poderoso Strigoi, me dije. Una bala de esas hubiese dañado a un Strigoi joven como Elena. Pero para Isaiah? Llevar varios disparos en el pecho era simplemente divertido. Mason también lo notó, y sus características se endurecieron cuando tiró el arma al suelo."¡Vete!" Le grité. Él todavía está en el sol, seguro. Pero él no me escuchó. Corrió hacia nosotros, alejándose de la luz protectora. Redoble mi lucha, con la esperanza de desviar la atención de Isaiah de Mason. No lo conseguí. Isaiah me empujó hacia Elena antes de que Mason hubiese alcanzado la mitad del camino. Rápidamente Isaiah bloqueó a Mason y lo agarró, tal y como lo había hecho antes conmigo. Pero, con algunas diferencias, Isaiah no sujetó a Mason por los brazos. No lo agarró por del pelo o lo amenazó con una larga y agonizante muerte. Isaiah simplemente detuvo el ataque, sujetó la cabeza de Mason con ambas manos y dio un rápido giro. Escuché el sonido de algo que se rompía. Los ojos de Mason se desenfocaron y después se quedaron vacíos.Con una mirada impaciente, Isaiah lanzó el cuerpo de Mason hacia donde estaba Elena sujetándome. Cayó delante de nosotras. Mi visión se volvió borrosa cuando las náuseas y los mareos me inundaron. "Entonces", le dijo Isaiah a Elena. "Haber si eso calma tu hambre. Y guarda algo para mí.

Capítulo 4 // Shadow Kiss // Vampire Academy 3


Y comenzó.
Al principio, las cosas no eran muy diferentes de cualquier otro día.Dhampirs y Morois asistimos separados a clases durante la primera mitad del dia. Christian tenia casi las mismas clases de la tarde que yo tuve el semestre pasado, asi que era casi como seguir mi propio horario de nuevo. La diferencia era que que yo ya no era una estudiante urante esas clases. No me sentaba en un escritorio ni tenia que hacer ningun trabajo. Además me sentia mucho mas comoda ahora que tenia que pararme en la parte de atrás del salón durante todo el tiempo, acompañada por los demás novatos que estaban en guardia con sus moroi.Afuera de la escuela, asi es como se hacian las cosas. Los Moroi eran la prioridad. Los guardianes eramos sombras.
Siempre estaba la fuerte tentación de hablarle a mis compañeros novatos, particularmente mientras los Moroi estaban haciendo sus propias cosas y hablando entre ellos. Aún asi, ninguno de nosotros lo hizo. La presión y la adrenalina del primer día nos tenían a todos comportandonos bien.
Después de biologia, Eddie y yo comenzamos a utilizar una tecnica de guardia llamada Guardia en pares. Yo era el guardia cercano y caminaba junto a Lissa y Christian para su defensa inmediata. Eddie, siendo el guardia lejano, caminaba a distancia y escaneaba el area en busca de posibles amenazas.
Seguimos este patrón durante el resto del día, hasta que la última clase llegó. Lissa le dio a Christian un rápido beso en la mejilla, y me di cuenta de que estaban despidiendose.
“Ustedes no tienen el mismo horario esta vez?” Pregunte gon desgano, haciendome a un lado del corredor para no interferir en el tráfico de estudiantes. Eddie ya habia deducido que nos separabamos y habia suspendido sus deberes de guardia para venir a hablar con nosotros. La verdad es que yo no tenia ni idea de como eran los horarios de Lissa y Christian durante este semestre.
Lissa se dio cuenta de la decepción en mi mirada y me dio una sonrisa amable. “Lo siento. Vamos a estudiar juntos después de la escuela, pero ahora mismo, tengo que ir a Escritura creativa.”
“Y yo, ” dijo Christian, “Voy a Ciencias Culinarias”
“Ciencias Culinarias?” me queje “Elegiste Ciencias culinarias? Esa es la clase más estúpida de la historia”.
“No lo es”, respondió el. “E incluso si lo fuera... bueno, es mi último semestre, de acuerdo?” Yo gruñi.
“Vamos Rose” Lissa se rió. “Es solo un periodo de clase. No será tan-”
Ella fue interrumpida cuando una conmosión comenzó delante de nosotros en el corredor. Nosotros y todos los que estaban cerca paramos a mirar. Uno de mis instructores, Emil, apareció practicamente de la nada- y actuando como Strigoi- capturó a una chica Moroi. El la balanceó a un lado, presionando su pecho y exponiendo su pecho como si la fuera a morder. No pude ver quien era, sólo unos mechones de pelo rubio, pero su protector asignado era Shane Reyes. El ataque lo habia tomado por sorpresa - era el primero del día- pero el sólo se tardo un momento en patear a Emil a un lado y quitar a la chica de su camino. Los dos chicos quedaron enfrentados, y todos los mirabamos con atención. Algunos incluso silvaron y gritaron, animando a Shane.
Uno de los que gritaba era Ryan Aylersworth. El estaba tan concentrado en la pelea, en Shane sosteniendo su estaca de practica, que no notó los otros dos guardianes adultos que se acercaban a el y a Camille. Eddie y yo nos dimos cuenta al mismo tiempo y nos erguimos, nuestros instintos listos para lo que viniera.
“Quedate con ellos” Eddie me dijo. Se dirigió hacia Ryan y Camille, quien apenas se estaba dando cuenta de la trampa que les habian tendido. Ryan no reacciono tan bien como lo hizo Shane, particularmete porque tenía dos atacantes. Uno de los guardianes distrajo a Ryan, mientras el otro-Dimitri, tomo a Camille. Ella grito, sin fingir su miedo. Aparentemente no le gustaba tanto como a mi estar en los brazos de Dimitri.
Eddie se dirigio hacia ellos, acercandose desde atrás y lanzo un golpe a la cabeza de Dimitri. Apenas e hirió a Dimitri, pero aún asi el estaba sorprendido. Yo apenas y habia podido darle un golpe en todos nuestros entrenamientos. El ataque de Eddie obligo a Dimitri a soltar a Camille y a enfrentarse a el. El se giro, con la gracia de un bailarin, y avanzó hacia Eddie.
Mientras tanto, Eddie habia “matado” su Strigoi, y se acerco para ayudar a Eddie, acercandose a Dimitri por el otro lado. Yo los observé, con los puños apretados de la emocion, intrigada con la pelea en general, y viendo a Dimitri en particular. Me asombro que alguien tan letal pudiera ser tan hermoso. Desee ser parte de la pelea, pero sabia que tenia que cuidar el área a mi alrededor, en caso de que algún “Strigoi” atacara aqui.
Pero ellos no lo hicieron. Shane y Eddie “asesinaron” exitosamente a Dimitri. Una parte de mi estaba triste por eso. Quería que Dimitri fuera bueno en todo. Como fuera, Ryan habia tratado de ayudar y habia fallado. Dimitri tecnicamente lo habia “matado”, asi que senti una inapropiada tranquilidad pensando que de todas formas Dimitri habia sido un Strigoi de los malos.El y Emil felicitaron a Shane por ser tan rápido y a Eddie por darse cuenta que tenía que ocuparse de este ataque en grupo, en lugar de un combate uno-a-uno. Yo obtube una mirada de aceptación por cuidar la espalda de Eddie y Ryan fue regañado por no ponerle atención a su Moroi.
Eddie y yo nos felicitamos mutuamente, felices de haber obtenido altas calificaciones en nuestra primera prueba. No me hubiera importado haber tenido un rol más importante, pero esta no era una mala forma de comenzar nuestra experiencia de campo. Nosotros chocamos nuestras manos y vi a Dimitri saludarnos con la cabeza mientras se iba.
Con todo el drama terminado, nuestro grupo se dividió. Lissa me dio una última sonrisa sobre su hombro y me hablo a través del vinculo, Diviertete en Ciencias Culinarias!. Yo gire mis ojos, pero ella y Eddie ya habían desaparecido en la esquina.
“Ciencias Culinarias” sonaba bastante impresionante, pero realmente, era sólo un termino elegante para lo que era esencialmente una clase de cocina. A pesar de mis bromas a cerca de lo estúpido que era, le guardaba cierto respeto. Después de todo, yo apenas y podía hervir agua. Aún asi, era muy diferente de una materia electiva como Escritura o debate, y no tenia dudas de que Christian la habia tomado porque era una clase fácil y no porque quisiera ser un chef algún día. Por lo menos podria obtener algún tipo de satisfacción viendolo mezclar un pastel o algo. A lo mejor y el hasta tendría que usar un delantal.
Habian otros tres novatos en la clase que estaban vigilando sus Moroi. Como el salón de Ciencias Culinarias era grande y abierto , con muchas ventanas, asi que los cuatro nos reunimos y creamos un plan para unir esfuerzos y asegurar toda la habitación. Cuando veia a los novatos en sus experiencias de campo durante los años pasados, sólo habia prestado atención a las pelea. Nunca me habia fijado en el trabajo de equipo y las estrategias que debian estar desarrollandose. Teoricamente, nosotros cuatro estabamos alli solo para proteger a nuestros Moroi, pero terminamos protegiendo a la clase entera.
Mi lugar estaba cerca a una puerta de incendios que dirigia a la salida de la escuela. Coincidencialmente, estaba justo al lado del puesto de cocina de Christian. La clase normalmente cocinaba en parejas, pero este grupo era impar. En lugar de trabajar en un grupo de tres, Christian se ofrecio a trabajar solo. A nadie parecio importarle. Muchos recordaban a su familia con los mismos prejuicios que Jesse. Para mi desgracia, Christian no estaba cocinando un pastel.
“Que es eso?” pregunté, observandolo tomar un recipiente con algun tipo de carne cruda y procesada del refrigerador.
“Carne” dijo, introduciendola en una tabla de picar.
“Ya me di cuenta de eso, idiota. De que tipo?”
“Bife de lomo” Saco otro contenedor y entonces otro. “Y esto es ternera. Y esto es cerdo”.
“Piensas alimentar a un tiranosaurio con eso?”
“Sólo si tu quieres un poco. Esto es para hacer pastel de carne.”
Me quedé mirandolo. “Con tres tipos de carne?”
“Porque comer algo llamado pastel de carne si no le vas a poner algo de carne?”
Sacudí mi cabeza. “No puedo creer que este sea apenas el primer día contigo”
El miró hacia abajo, concentrandose en su creación de tres carnes.
“De verdad estas haciendo de esto algo muy grande. De verdad me odias tanto? Te escuché gritar con todas tus fuerzas en el gimnasio”.
“No, yo no lo estoy haciendo. Y... tampoco te odio” Admití.
“Tan solo te estas desquitando conmigo porque no te asignaron a Lissa”
No respondí. El no estaba tan lejos de la verdad.
“Sabes” continuó, “De hecho podría ser bueno para ti practicar con alguien diferente”.
“Lo se, Dimitri dice lo mismo”
Christian puso su carne en un recipiente y comenzo a añadirle algunos otros ingredientes. “Entonces porque cuestionarlo? Belikov sabe lo que hace. Yo confío en todo lo que el dice. Apesta que la escuela vaya a perderlo despues de que nos graduemos, pero prefiero verlo con Lissa”.
“Yo también”.
Él paro y me miro a los ojos. Los dos sonreimos, casi sin creer lo impresionados que estabamos de estar de acuerdo en algo. Un momento después el continuó con su trabajo.
“Tu también eres buena” dijo el, no tan gruñón. “La forma en que te desenvuelves...”
El no termino su frase, pero yo sabia de que estaba hablando. Spokane. Christian no estuvo a mi lado cuando maté al Strigoi, pero el fue de importancia vital para ayudarnos durante el escape. El y yo trabajamos en equipo, usando su magia de fuego para ayudarme a derrotar a nuestros captores. Habiamos trabajado muy bien juntos, dejando a un lado todas nuestras peleas.
“Supongo que tu y yo tenemos mejores cosas que hacer que pelear todo el tiempo” Asentí. Como preocuparnos acerca del juicio de Victor Dashkov, pensé. Por un momento consideré contarle a Christian lo que me habia enterado. El habia estado cerca la noche en que pasó lo de Victor el otoño pasado, pero decidi no mencionar aún las noticias. Lissa necesitaba enterarse primero.
“Sip” Christian dijo, sin saber mis pensamientos. “Agarrate bien, pero tu y yo no somos tan diferentes, quiero decir, yo soy más listo y mucho más gracioso, pero al final del día, los dos queremos mantenerla segura”. El dudo. “Tu sabes que no la quiero alejar de tu. No puedo, nadie puede, no mientras ustedes dos tengan su lazo”
Me sorprendio que el hablara de eso. Honestamente sospecho que habian sólo dos razones por la que nosotros discutiamos tanto. La primera, que por nuestras personalidades a los dos nos gustaba discutir. La otra razon -la realmente importante- es que los dos sentiamos envidia de la relación del otro con Lissa. Pero como el dijo, los dos teniamos los mismos motivos. Los dos nos preocupamos por ella.
“Y no creo que el lazo los aleje a ustedes”, dije. Yo sabia que la conexión le molestaba. Como podrías llegar a acercarte romanticamente a alguien, cuando esa persona tiene ese tipo de conexion con otra persona, incluso si esa persona es tan solo un amigo? “Tu le importas mucho”... no fui capaz de decirle que ella “lo ama”. “Ella tiene un lugar totalmente diferente separado para ti en su corazón.”
Christian puso su platillo en el horno. “No puedo creer que hayas dicho eso. Tengo el presentimiento de que estamos al borde de abrazarnos y ponernos lindos sobrenombres” . El estaba tratando de sonar asqueado por lo que dije, pero se notaba lo mucho que le gustaba que le dijera lo importante que el es para Lissa.
“Yo ya te tengo un sobrenombre. Pero me metería en problemas si lo digo en clase”.
“Ah”, dijo alegremente. “Esa es la Rose que conozco”.
Él se fue a hablar con otro amigo, mientras su pastel de carne se cocinaba. Mi puerta era una posición vulnerable, y yo no deberia estar alejada hablando, incluso cuando el resto de la clase lo estaba haciendo. Al otro lado del salón, pude ver a Jesse y a Ralf trabajando juntos. Como Christian, escogieron también una clase fácil.
No ocurrió ningún ataque, pero un guardián llamado Dustin entró al salón a revisar nuestras posiciones.El estaba cerca a mi cuando Jesse decidió acercarse. Al principio pensé que se trataba de una coincidencia - hasta que Jesse habló.
“Me arrepiento de lo que dije antes, ROse. Ya me di cuenta. Tu no estás enojada por Lissa o Christian. Tu estás enojada porque las reglas dicen que debes cuidar a un estudiante e Ivan Ivashkov es demasiado viejo. Por lo que escuche, ustedes dos ya han tenido mucha práctica vigilando sus cuerpos”.
La broma hubiese podido ser mucho más graciosa, pero he aprendido a no esperar mucho de Jesse. Sabía de sobra que a el no le importabamos ni Adrian ni yo. Tambien sospechaba que el no creia que hubiera algo entre nosotros. Pero Jesse aún estaba enojado por la forma en que lo traté en la mañana, y esta era su oportunidad de vengarse. Dustin, lo suficientemente cerca para escucharlo todo, no estaba interesado en la charla estúpida de Jesse. Sin embargo, Dustin probablemente estaría interesado en verme golpear la cabeza de Jesse contra la pared.
Eso no quería decir que yo me iba a quedar callada. Los guardianes hablan con los moroi todo el tiempo; ellos sólo tienden a ser respetuosos y a seguir vigilando al rededor mientras lo hacen. Asi que le di a Jesse una pequeña sonrisa y simplemente dije, “Su ingenio es siempre un encanto, Señor Zeklos. Apenas y puedo contenerme cuando lo escucho”. Entonces me voltee y observé el resto del salón.
Caundo Jesse pensó que no iba a hacer nada más se rió y enpezo a andar, aparentemente pensando que había gando una gran victoria.
“Imbecil” murmuró Christian, regresando a su puesto. A la clase le quedaban cinco minutos.
Mis ojos siguieron a Jesse a través del salón. “Sabes algo, Christian? Me siento muy feliz de ser tu guardiana”.
“Si me estás comparando con Zeklos, realmente no pienso tomar eso como un halago. Pero ven, prueba esto. Entonces de verdad te vas a alegrar de estar conmigo”.
Su obra maestra estaba terminada, y me dió una rebanada. No me habia dado cuenta, pero justo antes de meter al horno el pastel de carne, el lo habia envuelto en tocino.
“Santo dios” dije. “Este es el estereotipo de comida de vampiro más grande de la historia”
“Sólo si estuviera crudi. Que piensas?”
“Está bueno” dije de mala gana. Quien pensaría que el tocino podía hacer toda la diferencia? “Realmente bueno. Creo que tienes un futuro promisorio como ama de casa mientras Lissa trabaja y gana millones de dolares”
“Que gracioso, es es exactamente mi sueño”.
Dejamos la clase mucho más animados. Las cosas estaban mejorando entre nosotros, y decidi que podía aguantar las próximas seis semanas como su guardiana.
El y Lissa se iban a encontrar en la biblioteca para estudiar - o pretender que lo hacían- pero el tenía que ir a su cuarto primero. Asi que lo segui a través del patio, de nuevo hacia el viento de invierno que se habia puesto aun más frio desde el anochecer hace siete horas. La nieve en los caminos, que se habia derretido un poco en el sol, se habia congelado ahora y hacía dificil caminar. Durante el camino se nos unio Brandon Lazar, un moroi que vivia en el corredor de Christian. Brandon apenas podia contenerse, contandonos sobre una pelea que presencio en clase de matematicas. Escuchamos su historia, riendonos al imaginarnos a Alberta metiendose por la ventana.
“Hey, ella podrá ser vieja, pero puede vencer casi a cualquiera de nosotros” Les dije. Mire confundida a Brandon. Tenia moretones y golpes en su cara. Además tenia unas extrañas marcas rojas cerca a su oreja. “Que te paso a ti? Tambien has estado peleando con los guardianes?”
Su sonrisa desaparecio de repente, y miro hacia otra parte. “Nah, sólo me caí”.
“Vamos” dije. Puede que los moroi no entrenen como los dhampir, pero tenian peleas entre ellos, tanto como todos los demás. Trate de pensar en algún moroi con el que el pudiera tener un problema. La mayoria del tiempo Brandon era bastante agradable. “Esa es la mas patetica y poco original excusa del mundo”.
“Es verdad” dijó, aún evitando mis ojos.
“Si alguien te está molestando, puedo darte algunos consehos”
El se volteo hacia mi, cerrando sus ojos. “Sólo déjalo asi”.
El no fue grosero, ni nada por el estilo, pero habia una nota firme en el tono de su voz. Era casi como si creyera que tan sólo con decir las palabras pudiera obligarme a obedecerlo.
Yo me rei. “Que estás tratando de hacer? influenciarme-”
De repente note un movimiento a mi izquierda. Una sombra ligera mezclandose con las oscuras formas de un montón de pinos llebos de nieve - pero moviendose lo suficiente para captar mi atención. La cara de Stan emergió de la oscuridad y corrio hacia nosotros.
Finalmente, mi primera prueba.
La adrenalina se disparo en mi como si se tratara de un Strigoi real acercandose. Reaccione inmediatamente, estirandome para agarrar a Brandon y a Christian. Este era siempre el primer movimiento, poner mi vida antes que las de ellos. Empuje a los dos chicos a un lado y me voltee hacia mi atacante, buscando mi estaca para defender a los moroi-
Y ahí fue cuando el aparecio.
Mason.
El estaba algunos metros frente a mi, a la derecha de Stan, viendose igual que anoche. Transparente. Brillante. Triste.
El cabello de la parte de atrás de mi cuello se paro. Olvide lo que estaba haciendo y las personas que estaban delante de mi desaparecieron. Solo quedo Mason - ese fantasmal Mason que brillaba en la oscuridad, y que parecia que queria decirme algo desesperadamente. El mismo sentimiento de impotencia que tuve en Spokane regresó a mi. No pude ayudarlo alli. No podía ayudarlo ahora. Mi estomago se puso frio y vacio. No podia hacer nada más que quedarme alli, preguntandome que estaba tratando de decirme.
El levanto una de sus manos traslucidas y no estaba claro que era lo que estaba señalando. Sacudí mi cabeza, sin comprender, pero deseando desesperadamente poder hacerlo. La tristeza en su rostro parecía crecer.
De repente algo me golpeó en el hombro, y me resbale hacia adelante. De repente el mundo reaparecio, sacandome de mi estado de adormecimiento. Apenas y pude poner mis manos adelante para evitar caerme al piso. Mire hacia arriba y vi a Stan parado adelante de mi. “Hathaway!” gritó. “Que está haciendo?” Parpadee. aún tratando de deshacerme del sentimiento de ver a Mason de nuevo. Me sentia cansada y mareada. Miré la cara iracunda de Stan y entonces mire hacia donde Mason estaba. Se habia ido. Mire de nuevo a Stan y me di cuenta de lo que habia pasado. En mi distraccion, permiti completamente que el realizara su ataque. Ahora tenia un brazo alrededor del cuello de Christian y el otro alrededor del de Brandon. El no los estaba hiriendo, pero su punto estaba claro.
“Si yo hubiera sido un Strigoi” gritó, “estos dos estarían muertos”.





Traducido por el Foro de Purple Rose, gracias a Caty, Elizabeth y Sky